Hubo un tiempo en que todos vivíamos pegados a la radio. Primero, a las estaciones amplitud modulada, AM, hoy ya casi inexistentes en el dial; luego a las de frecuencia modulada, FM, hoy, dominantes bajo una serie de formatos musicales, noticiosos, hablados o una mezcla de los tres. La radio era ese espacio entre mágico y mítico que en su momento de mayor apogeo, antes, durante y después de la llegada de la televisión, ejercía una extraña fascinación.
Es difícil saber si la radio sigue siendo tan atractiva como cuando era, solamente, magia, imaginación, cultura, talento y voz.
Sin embargo, y como todo tiempo pasado fue en parte mejor, pocas frases tan de impacto habitan todavía en el imaginario colectivo como las del veracruzanísimo Doctor I.Q., conductor de, precisamente el programa radial primero, televisivo después, de El doctor I.Q., Jorge Marrón Erostarbe, que inmortalizó expresiones tales como ¡Abajo a mi izquierda, arriba a mi derecha! para localizar a los concursantes de su programa, a quienes modosas edecanes hacían llegar un micrófono y el Doctor I.Q sus preguntas. Su programa concluía con un “se despide de ustedes, Jorge servidor, Marrón de ustedes”.
Otras voces inmortalizaron otras frases: Jorge Zúñiga hizo toda una creación de “Cervecería Moctezuma de México…creadora y distribuidora de Superior…la rubia que todos quieren…!; Jorge Labardini fue la voz histórica de los Domingos Herdez, León Michel, la voz de América, que hizo de su dicción y su pulcritud el mayor de sus talentos haciendo saber al que escuchara y viera que Raleigh –¿todavía existe la marca? — es el cigarro.
Y junto a ellos, con ellos, la inolvidable y metálica voz de ese rapsoda del fútbol que fue Ángel Fernández; o el Conde Gustavo Armando Calderón, Fernando Marcos –el único árbitro al que le quemaron un estadio— El Mago Pedro Septién, El Rápido Óscar Esquivel, y “ahí vieneeee la bolaaaa” o José Rogelio Ezquerra en Guadalajara al igual que Roberto Guerrero Ayala o Fernando Alonso padre, e incluso, pese a su estilo sarcástico, Roberto Hernández junior.
La radio en Veracruz no anduvo lejos de voces excepcionales lo mismo en la U, que en HV, la doble L, la TF o AVR. Sergio Morales Ortiz, Ángel Morales Roldán, Manuel Loyo de Valdés, Rafael Vergara; Luis Enrique Figueroa Escobar, Ernesto Figueroa Soto, Luis Olán y Aguilera, José Luis Feijoo, Ismael Landa; voces que su tiempo fueron históricas y muchas de las cuales permanecen al aire: José Luis Feijoo e Ismael Landa o Domingo Lucas.
Y voces que, por supuesto, ya pertenecen al recuerdo: Fernando Ortega Ramírez, Abelardo Varela Delgado, Antonio Liaño Sánchez, Bernardo Lorenzo “Nayo” y su hermano Manuel, y tanto otros como Pedro Díaz Reyes o Waldo López o Paco Morales y Orlando Cuallo que a su modo y en su tiempo, crearon escuela.
Quizás el último representante en activo de quienes lograron alternar con gente de aquella generación sea Xavier Moranchel. Poco queda de la vieja radio. Y cada vez quedará menos. ¡Salud y larga vida a la radio!, vámonos por un güisqui al Prendes, como antes, pero con sana distancia, por supuesto...
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