Además de la crisis política, en Veracruz, ahora también hay un serio problema con el Secretario de Educación Zenyazen Escobar García, a quien se le señala como el responsable de iniciar una férrea persecución política en contra la Universidad del Conde en la capital del estado.
Lo raro, pero muy difícil de entender, es de que se ha intentando clausurar a esta prestigiada universidad de amplio prestigio y reconocimiento nacional con auditorias y revisiones fuera de todo orden y legalidad.
En donde no se han encontrado anomalías, y extrañamente persecución oficial sin éxito con sesgos hasta de difamación hacia esta importante casa de estudios
A la larga lista de escándalos del Secretario de Educación de Veracruz, se le suman en las últimas semanas una persecución política y despiadada en contra del Rector de la Universidad del Conde, Marco Antonio Conde Pérez, quien además dirige una de las Fundaciones con más actividad en el Estado, apoyando a cientos de niños, jóvenes y mujeres, desde hace ya varios años.
De esta situación anómala, ya son varios meses en los que se han recibido una serie de señalamientos injusticados en contra de la institución educativa que dirige Conde Pérez.
Las acciones de persecución se han orquestado desde el edificio de la SEV con una serie de auditorías y declaraciones muy graves, las cuales al paso del tiempo perdieron peso al no encontrarse irregularidades en dicha institución
Se supo que todo este aparato publicitario y político se desató por un Revoe, que la institución educativa solicitó hace algunos años a nivel estatal, en tiempo y forma, sin embargo nunca obtuvo respuesta de las autoridades.
Ante esto, también se dice “en los pasillos de la información de la rumorología clásica, que el bloqueo de trámite se ha orquestado al más alto nivel, ya que dicha carrera afecta intereses de un grupo que quiere consolidarse de manera “monopólica”, como el único prestador de ese servicio médico y alta especialidad.
Lo grave, es que en sus declaraciones, el secretario de Educación, ha dado una serie de imprecisiones, dando a entender que la institución educativa que dirige Conde Pérez, está en su totalidad “fuera de la ley”, afectando con esto a cientos de egresados, que cuentan con título y cédula profesional, que respalda el ejercicio de su profesión, por cierto, se dice que el Secretario incluso ha ordenado frenar todos los trámites administrativos de dicho centro Educativo, continuando con una afectación de daño moral a quienes realizan sus estudios de manera normal y legal desde hace ya varios años, en diferentes carreras.
Así, de intransigente y complicado el problema en un tema de educación normal, en donde lamentablemente se defienden intereses económicos, y esto se convierte ya en un conflicto de interés.
El proceder del secretario de educación de Veracruz, esta en duda y en un predicamento de una labor sesgada y fuera de todo orden.
Este conflicto afecta al avance educativo de un estado progresista en materia de educación superior y en donde se frena el amplio desarrollo logrado en los últimos años.
Aquí , lo recomendable es la conciliación para la gestión de labores que impliquen un avance en la Educación del Estado no se frene, en favor de la juventud y de la fuente laboral.
Las acciones de Zenyazen Escobar García, son también de que se ha negado a dar cumplimiento a una orden judicial, que lo obliga a entregar el Revoe en cuestión a la Universidad del Conde.
Y para darle vueltas al asunto da una serie de declaraciones cargadas de imprecisiones, tratando de distraer la atención de la opinión pública y de sus superiores, sólo cae en contradices y evidencia un mal proceder en el servicio público.
El maestro Marco Antonio Conde Pérez, ha acudido a las más altas instancias y esferas legales, actualmente, e incluso acudió al Senado de la República.
En el senado, hay la solicitud de la comparecencia Por parte de la CNDH al gobernador y a la fiscal del Estado.
Los expertos dicen, que se trata de los problemas que se registran en el quinto año de un mandato y que la conciliación debe ser la salida natural a la solución de conflictos.
Y como diría el filósofo y cronista de Tepito, Armando Ramírez, que tanto es tantito. Así las cosas.
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