“La Escuela es Nuestra” llega a la Vicente Lombardo de Veracruz

Pocas veces, se puede llegar al máximo de emoción de una historia de vida en una institución educativa en estos lares del grado de un “milagro”, por los “daños” lamentables registrados durante la pandemia.

El secretario de Educación de Veracruz (SEV) Maestro Zenyazen Escobar García, de manera sencilla, se presentó en la Escuela Vicente Lombardo Toledano, y llegó con todos los refuerzos de gran ayuda, la mañana de este lunes para proceder a las reparaciones de inmediato.

El titular de la SEV, se presentó en la institución educativa, que abarca varias colonias en la zona de Río Medio, para que se realicen los trabajos de reparación integral de esta escuela que durante los meses de asilamiento sufrió de pérdidas en sus instalaciones.

El lamentable deterioro en sus instalaciones, por quienes en ese tiempo aprovecharon para llevarse los cables de electricidad, de la tubería del agua potable, aires acondicionados y todo lo que pudieron.

Es un lugar de mucho crecimiento población en el puerto, allá en la zona norte de la ciudad de Veracruz, pero qué en el contraste de las calles pavimentadas en lo alto se ve una escuela, que colinda con unos terrenos, en donde hay algunos problemas de quienes van a depositar por ahí la basura.

Se trata de una escuela muy bien instalada, prácticamente se construyó en una zona alta y se llega por una calle en una pronunciada subida de alta circulación vehicular, y en la barda lateral se lee con orgullo el nombre de Escuela Vicente Lombardo Toledano.

La maestra Dolores Pérez Caballero, directora de la Escuela Lombardo Toledano, agradeció mucho al titular de la SEV su presencia en donde, sin decir agua va, informó que llegaría con todo el personal necesario para la reparación de las instalaciones eléctricas que habían sido sustraídas.

Así, sin luz y sin agua potable, se reiniciaron las clases, y los niños junto con sus padres muy orgullos asisten a clases en donde desde la entrada se han establecido todas las medidas sanitaras de forma estricta y por eso los alumnos y no se han contagiado de Covid-19, y por lo mismo la escuela con niños y maestros, volvió a la normalidad y a pesar de la falta de luz y de agua potable en las instalaciones, con mucho esfuerzo y apoyo de los padres de familia convocado por la directora, se dieron a la tarea de realizar guardias de apoyo a los niños, para abastecer de agua con cubetas en los sanitarios.

Se trata de una zona habitacional con mucha demanda de la anhelada escuela Lombardo, que, por su excelencia en el alto nivel educativo, dicen los padres de familia, que los niños aprenden rápido y son felices en ese lugar de aprendizaje.

Padres de familia y maestros, agradecieron la visita al secretario de Educación, Zenyazen Escobar García, quien llegó de sorpresa, para ordenar de inmediato las reparaciones a las instalaciones eléctricas, y también resolver los problemas de abasto del agua potable con la orden, “que se haga lo del agua de una vez”.

El milagro se hizo, y la maestra Lolita, la directora que se ha preocupado mucho por la escuela define el acontecimiento con alegría, sencillez y humildad: “fue suerte”. Andale.

La directora, después de la inolvidable visita del titular de la SEV a la Escuela Vicente Lombardo Toledano, se reunió con los padres de familia, y les dijo que las clases durante quince días serias a través de la plataforma digital en línea, para que los trabajadores estén arreglando las instalaciones, sin problema y sin riesgo para los niños. Los padres emocionados por sus chamacos, de inmediato aceptaron la propuesta.

La maestra Lolita, con 31 años de antigüedad en el magisterio veracruzano, menudita como la Madre Teresa, se mueve en silencio, habla con voz suave, y con la paciencia de una mujer que ama su trabajo por eso destella luz y energía, y que a pesar del trámite de su pensión ya en puerta, no quiere dejar la escuela para seguirle dando tiempo a su reparación. y que quede como antes había estado, muy bien equipada hasta con aire acondicionado en los salones, los que lamentablemente se llevaron los que quizás por necesidad se llevaron ese valor preciado, pero de mayor valor humano para que los niños estudien con gusto.

Las emociones encontradas de esta comunidad de la maestra Lolita, que anuncia a los padres de familia, a las maestras y maestros, muy jóvenes estoicos y dispuestos todos para recibir mañana a los niños que asisten con una alegría a sus clases y que les da mucha confianza a los cumplidores padres de familia, que andan felices ya que por fin la escuela vuelve a normalidad, y quedará solo aquellas anécdotas de los malos y buenos recuerdos en donde la adversidad sirve para vencer resistencias pero más aún para poner a prueba el carácter de todos en un equipo: la directora, maestros, alumnos y padres de familia, en donde la señora del aseo, Lupita, “es un baluarte” en la puerta y en el control de acceso, y de apoyo de la directora, para salir adelante en el día a día de clases de los niños con éxito.

Y el cierre con broche de oro, es que pronto les llegará la ayuda del Programa “La Escuela Es Nuestra” ordenado por el presidente AMLO y que por lo mismo harán un comité con los padres de familia, para en un periodo corto proceder a comprar los equipos y todo lo necesario con un presupuesto al parecer de 500 mil pesos, que tendrán que cuidar y aplicar escrupulosamente en su manejo, Jacques Delors, en aquel informe a la UNESCO que declaró la Escuela Encierra Un Tesoro, y con el apoyo del mexicano Rodolfo Stavenahen, tuvo razón a su visión de futuro: “Como puede la educación preparar a los generaciones venideras para las exigencias de un mundo en conmoción”.

¿Qué lugar reservan nuestras sociedades a los jóvenes en la escuela en la familia o en la nación? ¿Cómo hacer progresar en la humanidad los ideales de paz, libertad y de justicia social?: hay que dar a los jóvenes el lugar que les corresponde, y hacer de la educación una experiencia global que desarrolle a lo largo de toda la vida de cada individuo. Sentencio el que brillante ministro de economía y finanzas del gobierno francés, en tiempos de Françoise Mitterrand. Y que después fuera Presidente de la Comisión Europea por la propuesta de Mitterrand en reconocimiento a su talento y capacidad intelectual, y el pragmatismo de la vida en los tiempos de la globalización.

Mitterrand, recibió las cartas credenciales del embajador de México en Francia, el licenciado Ignacio Morales Lechuga, evento en 1993, y de mucha trascendencia histórica en la vida del famoso ex servidor público y notario en la ciudad de México. Un famoso veracruzano, reconocido como un luchador social incansable y critico audaz, y sin apego a ninguna ideología.

Así las cosas.