¿Gemini o GPT? La multimodalidad que pone en jaque tu privacidad

La inteligencia artificial multimodal modelos como Google Gemini 2.0 y ChatGPT Vision de OpenAI representan un avance revolucionario al procesar texto, voz, imágenes y video de manera simultánea. Sin embargo, mientras estas herramientas prometen hacer nuestras vidas más fáciles y productivas, también generan interrogantes sobre privacidad y seguridad. ¿Cómo podemos aprovechar estas tecnologías sin comprometer nuestra información personal?

El concepto de multimodalidad permite que las IA interactúen con varios tipos de datos al mismo tiempo. Imagina pedirle a una IA que analice un correo electrónico, haga mejoras en tiempo real mientras compartes tu pantalla o incluso que revise una imagen o video que subas. Estas capacidades, presentes en Gemini 2.0 y ChatGPT Vision, abren posibilidades impresionantes, pero también exponen a los usuarios a nuevos riesgos:

Tanto Gemini como ChatGPT Vision pueden entender en tiempo real lo que ocurre en una pantalla. Aunque esto puede agilizar tareas como el diseño o la edición de documentos, también aumenta el riesgo de exposición accidental de datos sensibles, como contraseñas, números de tarjetas o información confidencial.

La capacidad de estos modelos para interactuar mediante comandos de voz mejora la experiencia del usuario, pero plantea dudas sobre la grabación y el almacenamiento de las conversaciones. 

Estas IA pueden procesar fotografías y clips para extraer información relevante. Pero al compartir imágenes, corremos el riesgo de que datos sensibles, como ubicaciones o identidades, puedan quedar expuestos.

Antes de subir una imagen, compartir pantalla o utilizar comandos de voz, evalúa si la información visible es realmente necesaria para la tarea. Por ejemplo, evita compartir pantallas con contraseñas, datos financieros o documentos legales.

Tanto Google Gemini 2.0 como ChatGPT Vision ofrecen opciones para limitar el acceso a ciertos datos. En el caso de Gemini, puedes restringir el acceso a tu cuenta de Gmail o Calendar, permitiendo solo las funciones necesarias.

Si necesitas usar estas IA para trabajar con información confidencial, hazlo en un entorno controlado. Evita redes Wi-Fi públicas o dispositivos compartidos que puedan comprometer tu privacidad.

El futuro de la inteligencia artificial multimodal dependerá no solo de los avances tecnológicos, sino también de los derechos de los usuarios. Proteger nuestra información debe ser tan prioritario como disfrutar de las innovaciones que estas herramientas ofrecen.

La multimodalidad promete transformar la manera en que interactuamos con la tecnología, pero no debemos dejar que el entusiasmo por estas herramientas nos haga bajar la guardia. Entender cómo funcionan, tomar medidas proactivas para proteger nuestros datos y exigir transparencia a las empresas son pasos esenciales para aprovechar lo mejor de la IA sin comprometer nuestra seguridad.