Antes del 18 de agosto, el Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz notificará el pliego de observaciones a los entes fiscalizables, dependencias del Gobierno del Estado, ayuntamientos y organismos autónomos, de la cuenta pública correspondiente al ejercicio 2022.
A partir de la notificación, los responsables del manejo de recursos públicos tendrán un plazo de 15 días hábiles para solventar las observaciones derivadas de las auditorías.
Las observaciones del ORFIS deberán solventarse antes del 11 de septiembre, de acuerdo con el cronograma de la fiscalización del órgano auditor.
En ese mismo mes, septiembre, vence el plazo del ORFIS para terminar el informe general ejecutivo y los informes generales del resultado de ese trabajo, porque el primer día de octubre deberá entregar al Congreso todo el reporte de la fiscalización al ejercicio 2022.
A partir de ahí, el Congreso del Estado tendrá un mes para dictaminar la aprobación de esas auditorías.
Entre 2007 y 2020, el ORFIS interpuso 232 denuncias, por presuntos casos de daño patrimonial que superaron los 35 mil 462 millones de pesos; el mayor monto se concentró en dos ejercicios, 2015 y 2016, el último tercio del gobierno de Javier Duarte, cuando se consignaron presuntos desvíos por 22 mil y 9 mil millones de pesos, respectivamente.
Las revisiones a esos dos años se realizaron durante el gobierno de Miguel Ángel Yunes, cuando se desató una impresionante cacería contra ex funcionarios veracruzanos.
De los más de 35 mil 462 millones de pesos de daño patrimonial, el ORFIS pudo recuperar casi 2 mil millones de pesos, lo que representa menos del 6 por ciento de las irregularidades detectadas.
Como resultado a las auditorías al ejercicio 2021 –el último año de las anteriores administraciones municipales–, el órgano auditor reveló un presunto daño patrimonial por casi 3 mil millones de pesos en 205 ayuntamientos veracruzanos, en tres dependencias y en 32 organismos públicos descentralizados.
Sólo entre 2019 y 2022, el ORFIS presentó ante la fiscalía 38 denuncias penales.
La información más reciente indica que el pasado 24 de mayo, el órgano auditor presentó 12 denuncias contra igual número de ayuntamientos –pasadas administraciones– , entre los que destacan Altotonga, Rafael Lucio, Mecatlán, Naranjos, Tequila, Platón Sánchez y Texistepec, cuyos alcaldes, síndicos, tesoreros y directores de obras no pudieron solventar las observaciones que les fueron giradas.
La nueva revisión, que corresponde al ejercicio 2022, ya audita a las actuales autoridades municipales, en tanto que las dependencias del gobierno estatal ya han estado bajo la lupa del ORFIS en los tres años anteriores, sin mayores escándalos de corrupción.
Ya veremos, el primer día de octubre, cómo les fue a los actuales ediles veracruzanos en el ejercicio 2022, en el tema del manejo de los recursos, aunque lo más interesante generalmente se revela en el último año de la gestión, conocido como “el año de Hidalgo”. @luisromero85
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