El tercero en discordia

El amargue del dirigente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, de romper con el Frente Amplio por México, sirvió para despertar al Sol Azteca en tierras jarochas y, paradójicamente, no fue por causa de ningún perredista, sino por un político que por más de 20 los caminó en las filas del Partido Acción Nacional (PAN).

Hace una semana, Sergio Cadena, líder estatal del PRD en Veracruz, presumió en sus redes una reunión que casi pasó desapercibida, pero que tiene significado y podría mover los planes de la oposición en la carrera por la gubernatura.

El invitado especial fue el empresario Juan Bueno Torio, excandidato Independiente a la gubernatura de Veracruz en el 2016 y exmilitante del PAN, hasta su renuncia al partido por la imposición -así lo hizo ver en su momento- de Miguel Ángel Yunes Linares, como candidato a la gubernatura del albiazul ese mismo año.

Hasta hace un mes, Bueno Torio no figuraba en el mapa político electoral de Veracruz, a pesar de sus eternas aspiraciones por gobernar el estado. Fue en la visita que hizo a Veracruz el sábado 15 de julio la aspirante a la candidatura presidencial por el Frente, Xóchitl Gálvez Ruiz, que tuvo su reaparición en un acto político-partidista.

En ese momento, la cercanía entre Xóchitl Gálvez y Juan Bueno Torio llamó la atención de los integrantes del "Clan Yunes" y del grupo político del senador Julen Rementería del Puerto, que hasta entonces suponían que en la ecuación de la competencia por la candidatura a la gubernatura del PAN, solo había dos fórmulas, las suyas.

Bueno Torio y Gálvez fueron compañeros en el gabinete foxista, se sabe que el empresario cordobés y expanista supo antes que nadie la fecha de la visita de la senadora, pues además de todo son buenos amigos, así que, de inició, tiene toda su simpatía en caso de que ella consolide su candidatura en el Frente Amplio por México.

Esta irrupción sirvió para cambiar el mapa político electoral de la oposición. En el círculo yunista ya se habla de un Plan B, en caso de que el tercero en discordia se suba a la contienda electoral, como parece que será, con el apoyo de Xóchitl Gálvez como candidata.

Los Yunes estarían incluso negociando las posiciones al senado para los alcaldes de Veracruz y Boca del Río, Paty Lobeira y Juan Manuel de Unánue, a cambio de dar el pase libre y apoyo al candidato a la gubernatura por la oposición con mejores posibilidades de triunfo o con la valentía para hacer frente al Morena y su candidata o candidato oficial.

En tanto, el PRD tendría a su gallo para plantarse frente al PAN y al PRI con un perfil con posibilidades de hacer competencia, después de una larga sequía en la que el partido de izquierda quedó reducido a cuarta fuerza y rémora del PRIAN. Así las cosas, las internas en el frente opositor veracruzano se pondrá interesante.

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