El precio de la desbandada priista

La desbandada y los enroques seguirán presentándose de aquí al día de las elecciones del 2024, por eso no extraña que priistas y expriistas anuncien que se suman al proyecto que encabeza Claudia Sheinbaum en Morena de cara a la sucesión presidencial y las votaciones en los estados el próximo año.

Lo mismo pasa en Veracruz, de hecho, hasta parecería una fotografía de las elecciones del 2021, del 2018, del 2016 y así sucesivamente en el paso del tiempo. Y seguramente, así como Morena engrosa sus filas con políticos autoexiliados de sus partidos políticos, lo mismo pasará con el Frente Amplio por México y morenistas que no encuentren cabida como ellos quisieran en la 4T.

Lo que sí es una farsa es que les abra la puerta a opositores sin ofrecer nada a cambio, nadie está dispuesto a mostrar una incongruencia con su ideología política de la noche a la mañana sin nada a cambio.

Si bien el discurso debe de ser que todo aquel que se sume deberá de hacer “talacha” si quiere ser considerado en la distribución de candidaturas, antes que quienes ya militan, lo cierto es que es muy seguro que todos los liderazgos que se suman del PRI a la alianza que encabeza Morena, ya tienen más segura una candidatura que los propios militantes que viven en la incertidumbre de saber cómo les fue en el proceso interno y las encuestas.

En el caso de Veracruz, Anilú Ingram está a punto de aterrizar a la 4T para ofrecer su capital político en favor de Claudia Sheinbaum, Rocío Nahle, Manuel Huerta y quienes en adelante sean designados como candidatas y candidatos.

Pero desde ahora se sabe que su arribo no es de gratis. La todavía hoy diputada federal por el PRI, al menos en el papel, estaría alistándose para postularse por la diputación federal en el distrito 4, abanderada por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), aliado al Morena.

A Anilú Ingram le dará para hacer a un lado las aspiraciones de varios morenistas, incluso de algunos expriistas, y plantarse en el proceso electoral que ya inició contra la persona que resulte elegida como candidata del PAN, muy seguramente contra María Josefina Gamboa Torales, con quien ya se midió en las urnas en alguna ocasión.

La incursión de Anilú en Morena es probablemente uno de los enroques más favorables para el partido en las elecciones en Veracruz, ya que tendría la posibilidad más clara para allanar el bastión panista que desde hace más de dos décadas domina el PAN y desde hace al menos 15 años es el capital político más importante del Clan Yunes, el grupo político que domina al albiazul actualmente.

El hecho de que la postulación de la priista llegue vía PVEM es otra oportunidad favorable, ya que no solo permitirá a Morena evitar fricciones con su militancia, sino también a la propia Anilú Ingram aterrizar sin dar una imagen de contradicción, ya que el partido verde en un momento fue aliado del PRI y la abanderó a ella misma en la alianza.

Así las cosas, Anilú se encontrará con varios conocidos una vez que aterrice en la 4T, ya se verá.

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