El famoso Tío Fidel y el poder

Fidel Herrera Beltrán, cortó este siete de marzo una hoja más del almanaque.

El famoso Conde de la Cuenca del Papaloapan, orgullo de Nopaltepec, forma parte de esa generación de veracruzanos que sí los juntan arman la Tercera Guerra Mundial ¡cuidado!

Esa generación de personajes de la política veracruzana que son parte de esa la “generación que se fue” de quienes han dejado profunda huella como los hombres del poder.

Por ahí, como fueron apareciendo en el poder estatal veracruzano, Ignacio Morales Lechuga, poderoso secretario general de gobierno con Agustín Acosta Lagunes.

Creador de la Academia de Policía del Lencero con su primer director el mayor Joaquín Herrero, misma que sigue vigente “muchos años después” como reza la primera frase de Cien Años de Soledad

También con Nacho Morales, se construyó el Museo de Antropología de Xalapa y en ese gobierno de lucha en contra de los caciques se construyen puentes y carreteras como un legado a la entidad.

Después, Dante Delgado, ocupa el cargo de secretario general de gobierno con don Fernando Gutiérrez Barrios en 1986 y dos años después se queda como el gobernador del cuatrienio en relevo de FGB que fue designado secretario de gobernación en el mandato salinista.

DDR, deja una obra impresionante como los edificios de la Legislatura estatal y el palacio del Tribunal de Justicia.

Construye el Acuario de Veracruz y el paso a desnivel de Plaza Américas, además del WTC y de impulsar a Tlacotalpan como pueblo mágico, entre otras muchas acciones.

Después, Fidel Herrera Beltrán en tiempos de Miguel Alemán, fue senador del república y dejó pasar el cargo de secretario de gobierno en donde apoyó a su amiga la abogada Nohemi Quirasco, famosa por su colección de sandalias y su eterna secretaria particular de Paso de Ovejas, la maestra Ahumada.

El Tío Fidel, se encaminó a la candidatura al gobierno estatal, luego de que los del poder alemanista le disputaron el derecho de sucesión ante la ausencia del presidente priísta en los Pinos con el triunfo de Fox y el PAN en el año 2000.

Desde el apoyo de Cosmovisión con la venia del maestro José Pablo Robles Martínez, se le publicaron las notas que en todos los medios informativos le cerraron el camino.

Aquel sábado en el Gaucho, Fidel Herrera, se reunió con Arturo Herviz y Jazmín Copete, después pasó a la mesa de Mario Tejeda, Adolfo Beauregard y quién esto escribe para decir: “que no se hagan bolas el candidato soy yo”.

Esa noche se reunió en el Cacharrito con el maestro José Pablo Robles Martínez, le dio la primicia y el lunes salió con la nota de ocho columnas “el bueno es Fidel”.

Muchas reacciones de molestia en el palacio estatal, menos el gobernador Miguel Alemán. Andale.

Con el Tío Fide Veracruz cambió de paradigma en la política y así como se hicieron muchas obras y muchos se hicieron ricos a su sombra, quedó para la historia aquella su frase famosa: “lo que se paga sale barato”.

Después, Miguel Ángel Yunes Linares, antes había sido secretario de gobierno con el potosino Patricio Chirinos y años más tarde llega a la gubernatura por una alianza de partidos de oposición al PRI.

El político de Soledad de Doblado, ocupa la gubernatura de Veracruz por un periodo de transición de dos años después del gobierno de Javier Duarte.

MYL, en un mini mandato por lo corto del tiempo hizo lo que se pudo en una época difícil del presidente EPN.

Lo cierto es que estos cuatro personajes de la política veracruzana, Ignacio Morales Lechuga, Dante Delgado, Fidel Herrera Beltrán y Miguel Angel Yunes Linares, son genios con el nivel intelectual más elevado y los atributos más sobresalientes de la política y por lo mismo son de esa generación en peligro de extinción que agoniza en el tiempo y en el espacio.

Porque han sido inteligentes que han emergido de la superación personal y el esfuerzo, y sus éxitos no se lo deben a nadie más bien, “han sido arquitectos de su propio destino como triunfadores.

Nacho Morales, activo en su notaría y distante de la actividad política.

Fidel Herrera Beltrán, también retirado de la política y dedicado a escribir sus memorias.

Dante Delgado, activo en la política y es el único que ya entrado en la “catafixia”, prefiere el ruido que al silencio.

Miguel Angel Yunes Linares, retirado de la política y dedicado a atender a su familia y a sus nietos.

La política veracruzana requiere en el 2024 de un Ignacio, o un Fidel, o un Dante o un Miguel, para cambiar el rumbo del estado, o seguir como se está en tiempos de la Cuarta Transformación.

O que se tenga a la primera mujer gobernadora. Al tiempo falta menos.

Y como dicen en estos lares la Era de los Cuatro Fantásticos, sigue porque están vivos y viables, y unidos son dinamita. Así las cosas.