El acuerdo del PRI es que no hay acuerdo. Encuesta

Aunque todo parece indicar que no serán los Yunes del PAN, sí será uno de los dos Yunes del PRI, el que estará en la papeleta para gobernador en las elecciones del 2024.

La diputada local, Anilú Ingram Vallines tendrá que definir claramente si desea seguir haciéndole el “caldo gordo” a los del tricolor en el proceso interno, a la dirigencia nacional de Alejandro Moreno, con quien estuvieron este jueves en México ella y los dos Yunes, y a su odiado líder estatal, Adolfo Ramírez Arana, primo del antecesor Marlon Ramírez.

Y es que además de ella fueron los dos contendientes más fuertes dentro del Revolucionario Institucional. José Francisco Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa, que son quienes disputarán finalmente la encuesta, y de entre quienes se elegirá al candidato del tricolor.

Aunque el bloque opositor estará formado por el PAN y el PRD, al final se ha determinado que la propuesta es del PRI. Y sería tonto pensar que del PRI salga una propuesta ajena a un militante de ese partido, es decir, que impulsen a uno del PAN o del PRD, en donde por cierto, éste último no tiene ni para pelear una diputación federal o una senaduría.

Es así como los Yunes del partido rojo dialogaron en diversas ocasiones. Y en ese escarceo político ninguno quiso apoyar al otro para que fuera un candidato de unidad.

Atendieron además la recomendación de su dirigente nacional, Alejandro Moreno, en el sentido de que se pusieran de acuerdo con el método si es que no salían por unidad. Por ello, el método fue la encuesta.

A través de una encuestadora, que ha trascendido, es propuesta por Yunes Landa, se medirá a los dos Yunes y se decidió incorporar a Anilú Ingram, previa consulta con la dirigencia nacional, por eso de que para darle su presencia al tema de la paridad de género.

La encuestadora se dirigirá a los tres aspirantes para darles a conocer el resultado y no será de las contratadas por el CEN del PRI a fin de que primero se entregue los resultados al mismo, y “sean cuchareados” los parámetros con los que se definirá a la o al mejor posicionado.

El “relleno” se complementa con Cirilo Vásquez Parissi, Lorena Piñón y Marlon Ramírez Marín. La versión que desde anoche surgió fue que la participación de éste último fue condicionada.

Y es que se le señala de un desvío de recursos otorgados al partido como prerrogativas y por lo que se presume no entregó cuentas claras. Una vez que esto sea informado y se despeje cualquier sospecha del mal uso del dinero del partido, entonces podría ser considerado en el informe final de la encuesta.

Según la entrevista que Ingram, los Yunes y la comparsa que les acompañaron, sostuvieron con su líder nacional, sería el próximo fin de semana cuando se den a conocer los resultados.

De acuerdo a lo dicho por Ingram Vallines el estudio se hará entre los militantes y no se abrirá a la ciudadanía como fue su propuesta que, junto con otros planteamientos, fueron desechados totalmente por su dirigencia.

Por ello a la diputada local no le queda más que seguir abriendo brecha en otro partido que, junto con su pareja Fernando Kuri, ven como un plan B a donde establecerse. De igual forma que se está sumando el duartista y exdiputado, Jorge Carvallo Delfín empujando por el partido ganador en Veracruz.

LA DOBLE JUGADA DE LOS YUNES AZULES

Ya es sabido que los más felices con la determinación de su partido Acción Nacional para que el PRI fuera quien lleve mano en Veracruz, son el clan de los Yunes, Miguel Ángel y Fernando, así como su papá, el exgobernador Yunes Linares.

Y es que con esta jugarreta se quitan de enfrente al senador Julen Rementería quien es un férreo aspirante a la gubernatura, pero necesita que su partido lo arrope primeramente, y segundo, que el PRI le diera entrada. Algo que seguramente no pasará pues quien gane en la encuesta será quien abandere al Frente Amplio por México, FAM.

Todo parece estar listo para que sea Pepe Yunes el que encabece dicha coalición y para ello, es donde Julen podría vender mejor sus activos, ya que los Yunes del PAN no son dignos de confianza del oriundo de Perote. No así con su tío y primo Héctor, con quien incluso, ya hicieron las pases, luego del acalorado proceso que protagonizó con estos, cuando disputó la gubernatura con Miguel Ángel papá y quien finalmente la obtuvo en el 2016 para ejercer un bienio.