Luego de que la Comisión de Vigilancia del Congreso local determinara que se practiquen 46 auditorías al mismo número de ayuntamientos se generaron especulaciones sobre si las revisiones fueron emitidas solo a los enemigos del gobierno o a los alcaldes opositores y que no se han “alineado”.
“Radio bemba” fue activada sin duda en municipios que tienen fama de ser muy comunicativos y a los que les tocó la nada orgullosa suerte de encontrarse en esta selecta lista.
Uno de ellos es el caso de Alvarado, donde es tradición que las noticias corran como “reguero de pólvora” y la gente además de ser muy hospitalaria también es bastante pícara en sus comentarios.
Y es que en la tierra donde se cocina el mejor arroz a la tumbada y de donde es famoso el “paseo en burro”, pero también de dónde han sacado a lomo de ese noble animal a algunos alcaldes, comenzaron a circular versiones de que al edil Bogar Ruiz Rosas le tocaba ser auditado.
El tema es que además de los presuntos desvíos en su administración municipal se iba a extender a sus propiedades, puesto que es “comidilla” de los alvaradeños y en redes sociales, la fortuna que tiene en caballos pura sangre y lo que todo el pueblo sabe es que han sido adquiridos en esta administración.
Sin duda un chisme que alcanzó un efecto “bola de nieve” en la Generosa.
Quizá la disyuntiva sobre la represión o el cobro político será el discurso del alcalde para defenderse de la investigación de anomalías con el erario por parte del ente fiscalizador, pero lo cierto es que en el pecado llevará la penitencia.
Y es que él mismo se ufanó de la buena relación que mantenía con las autoridades estatales, primero con el gobernador, Cuitláhuac García y luego, con el secretario de Gobierno, Eric Cisneros, pero pronto cayó de la gracia cuando éstos supieron del tipo de político o servidor público con el que trataban y la cola que arrastra el experredista, expanista y ahora edil por el partido Verde Ecologista.
En puerta, por cierto, tiene el incumplimiento del pago de laudos, y se cuece incluso un proceso de amparo en el Poder Judicial de la Federación de la Ciudad de Boca del Río. En esta querella se exige además la destitución y consignación ante la justicia federal del alcalde de Alvarado, Bogar Ruiz.
Lo anterior por no cumplir, según trascendió este miércoles, por los mandatos del Tribunal Laboral, quien además de pagar puede verse requerido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación quien ordenaría su destitución por desacato e incumplimiento de un deber legal y los delitos que le resulten.
MUY EN CORTO
DOS CABEZAS VAN POR MORENA. Aunque hay otros aspirantes, la realidad es que en el estado se han hecho visibles dos liderazgos para buscar la presidencia del Consejo Estatal del partido Morena.
Por un lado el “gallo” del delegado de Programas Sociales, la corriente federal de Manuel Huerta Ladrón de Guevara, el diputado federal, Jaime Humberto Martínez Bernabe, quien se ha destapado abiertamente, y afirman mantiene una lucha férrea contra todo lo que se mueva en el plano estatal.
En corto y en no tan corto abre fuego contra el gobierno del Estado y la lucha se ha centrado en descalificativos para lograr la dirigencia.
Por otro lado, el que aspira también es un funcionario salido de la actual administración, Esteban Ramírez Zepeta, quien no ha abierto un frente directo contra su oponente pero su discurso lo ha centrado en que tiene las bases y el apoyo.
Cada vez se le ve más metido en la carrera por encabezar a Morena en Veracruz y fue claro en hablarle a la militancia sobre lo que necesita la Cuarta Transformación durante su cónclave en el municipio de Cosamaloapan:
“Si no hubiera sido por ustedes que entregan el todo por el todo, que se ponen la camiseta de Morena y que salieron a las calles a decir: tenemos que cambiar el rumbo de este país, no hubiésemos logrado nada, sin el pueblo no se hace nada”.
El legislador federal Martínez Bernabe protagonizó en cambio serias acusaciones contra el secretario de Gobierno, Eric Cisneros por la supuesta intromisión en la asamblea que al final fue cancelada por todos los desmanes que se dieron durante el intento democratizador del año pasado pero que fracasó y recibieron la orden del CEN nacional de cancelar todo proceso.
A Ramírez Zepeta se le ve más conciliador y ha tomado el discurso contra la corrupción. Ayer mismo en Cosamaloapan externó sobre los retos que enfrenta Morena para ratificar el triunfo y consolidar los cambios de la Cuarta Transformación de cara a las próximas elecciones y que “no es fácil erradicar 80 años de corrupción” en México y la 4T es la única opción para hacer frente a esta ardua tarea.
A Ramírez no se le ve solo pues en las reuniones estuvieron presentes Javier Gómez Cazarín, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso local; las diputadas locales, Margarita Corro, Deisy Juan Antonio y Florencia Martínez, así como el Secretario de Organización y de Jóvenes, Yair Ademar y Ángel Echeverría.
Es probable que de seguir la lucha de frente el proceso renovador de la dirigencia en Veracruz saque chispas.
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