Un planeta resiliente para todos

“La naturaleza es todo lo que necesitamos para preservar el mundo”. Henry David Thoreau. Naturalista norteamericano.

El Día Mundial de la Educación Ambiental se celebrará el 26 de enero de 2023. El tema es "Hacia un planeta resiliente para todos”.

Esta fecha tuvo su origen a partir de la Declaración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente celebrada en Estocolmo, Suecia, en junio de 1972. En este encuentro se debatió la importancia de cuidar el medio ambiente y se expuso la necesidad de unos principios comunes que ofrecieran a la sociedad una inspiración y guía para preservar y mejorar nuestro entorno. Las posteriores conferencias internacionales (Belgrado, 1975; Tbilisi, 1977; Río de Janeiro 1992, Cumbre de la Tierra; Guadalajara 1997, II Congreso Iberoamericano de Educación Ambiental) vendrían a corroborar la importancia de la educación.

Se habla de educación ambiental como el medio más efectivo para concientizar a la población sobre la necesidad de preservar el ambiente con miras a lograr una mejor calidad de vida en las generaciones actuales y futuras.  

La educación ambiental debe ser un proceso continuo y permanente que se debe ir adaptando a las necesidades de cada época dando respuesta a las crisis que afectan al planeta.

Pese a los esfuerzos por conservar los recursos naturales no se ha podido frenar el deterioro ambiental, debido, posiblemente, a que no logramos tener conciencia y actitud de respeto hacia la naturaleza.

Resiliencia es el término empleado en ecología para indicar la capacidad de comunidades y ecosistemas de absorber perturbaciones, sin alterar significativamente sus características de estructura y funcionalidad; pudiendo regresar a su estado original una vez que la perturbación ha terminado.

Los retos para los próximos años pueden circunscribirse a nuevos o anteriores temas, pero de nueva cuenta, el mayor reto está en contribuir en la construcción de una ciudadanía formada, comprometida y resiliente.

Por esto y ante el deterioro y la degradación del medio ambiente, es fundamental promover una Cultura para la Conservación y un planeta resiliente, en que toda la humanidad busque cambiar sus malos comportamientos y hábitos con su entorno, donde esa falta de cultura ambiental es la que ha llevado a la destrucción de todos los recursos naturales, ecosistemas y los elementos que hacen vida en el planeta tierra.

El planeta necesita urgentemente de ciudadanos con educación ambiental y a su vez, una cultura de las generaciones para la conservación de los recursos, uso sostenible del agua, aire, suelo, flora y fauna, por medio de la formación de hábitos ecológicos y actitudes que permitan detener la actual problemática socioambiental que el mismo hombre ha generado por sus actividades insostenibles con su entorno natural.

Posiblemente estamos ante una nueva oportunidad de repensar el mundo donde vivimos, pero sobre todas las cosas, de actuar de manera diferente, sin hostilidad con los que compartimos y convivimos en este hogar… ¡Nuestro ResilientePlaneta Tierra!

#CambiaUnaAccionCambiaTodo.