Adán Augusto y el huevo de la serpiente

En la cápsula editorial denomina La negra, al estilo Rayuela, en la Jornada de Veracruz, el editor consigna:

 "Morena está incubando en sus nuevas adquisiciones el huevo de la serpiente".

 Este fin de semana, un día antes de la gira multi actividades de la presidenta Claudia Sheinbaum a Veracruz, el coordinador de la bancada de Morena en el Senado, Adán Augusto López Hernández, le envió un "regalito cariñoso" a la mandataria del país, aprovechando que estaría en tierras veracruzanas.

 El senador tabasqueño dio a los Yunes, los otrora enemigos de Andrés Manuel López Obrador, AMLO, los acérrimos detractores de la 4T en Veracruz y en México, un premio con la presidencia de la Comisión de Hacienda para el senador venido del PAN y ahora afin a los morenistas, Miguel Angel Yunes Márquez.

 Entonces, ese mismo día, a unas horas del anuncio, la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle García, sobre este hecho, en entrevista a este reportero, reviró:

"Adán, que siga abrazando lo que quiera, allá él, Morena se lo demandará".

 Además, respondió también que el propio Movimiento sabe diferenciar entre los distintos liderazgos el "quién es quién en la congruencia".

 Y agregaría:

"Y yo ahí me quedo, en coordinar, guiar y representar a la esencia y raíz de la transformación que está en marcha en Veracruz que construimos al lado de Andrés Manuel López Obrador y que hoy le da continuidad la presidenta Claudia Sheinbaum".

 No cabe duda, que le pusieron el sello de la casa. La perversidad, ante todo, y para ello se prestó obviamente, el ex secretario de Gobernación, y frustrado aspirante a la Presidencia del país, Adán Augusto.

"Que cada quien cuide a sus amistades" aseguran que, en corto, la propia mandataria estatal se refirió así a la reunión Adán y los Yunes, papá e hijo, que minutos antes se dejaron placear por el coordinador de Morena para luego anunciar el nombramiento.

 Como se dice en el argot delincuencial, la noche anterior a la productiva y representativa gira presidencial de Sheinbaum, quien se desvivió en elogios para la gobernadora, la perversidad de los Yunes y de Adán le calentaron la plaza, políticamente, a la primera ejecutiva del país.

 Y como señala el comentario La negra en la Jornada, la serpiente, comienzan a incubar el huevo en Morena, que se lo permite.

 Una serpiente, de color rojo, amarillo y ahora guinda. El coralillo carece del azul, pero hay quienes aseguran que también se le deja ver, es la que podría incluir a todos esos colores.

MUY EN CORTO

 LOS MENSAJES QUE NO QUIEREN VER.  Dice el viejo refrán que una imagen dice más que mil palabras, y pudimos corroborarlo el pasado viernes cuando en un evento público, la gobernadora Rocío Nahle fue acompañada por la diputada Rosa María Hernández Espejo en el aeropuerto Heriberto Jara Corona, para recibir a la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum.

 Y es que la acción se toma como un mensaje implícito que muchos no quieren ver: el respaldo mutuo basado en principios y trayectoria.

No es lo mismo pedir la selfi, que ser invitada a la foto oficial.

Y francamente es de lo más coherente que hace MORENA y para bien de los veracruzanos, pues mientras los otros aspirantes a la alcaldía de Veracruz llegaron al partido según su conveniencia, Rosa María ha mantenido una postura firme y coherente, siempre apegada a sus ideales de izquierda.

 Tan solo hay que considerar que en otros municipios los externos, o gente sin perfil, ni respeto a los principios de la 4t, incluso hasta con pendientes con la justicia, se les quieren colar o ya se colaron.

 Y en este caso, con Hernández Espejo, la cercanía refleja una relación política basada en la confianza y la afinidad ideológica.

En un entorno político lleno de cambios y movimientos, Rosa María sigue siendo una figura constante, auténtica y comprometida con su gente y con MORENA.

 Como dicen por ahí, pronto habrá señales. Tan es así que hasta los de casa han buscado a la aspirante y legisladora federal, para colaborar con su capital político y experiencia incluso, en tiempos libres, pues muchos de ellos son funcionarios estatales o federales, para lograr el objetivo común: Devolverle a los veracruzanos el puerto y liberarlo del grupo que lo ha facturado a su nombre bajo las siglas del PAN.