A LA OPINIÓN PÚBLICA

Para nadie es ajeno que la situación por la pandemia de Coronavirus, mejor conocido como Covid-19, es alarmante y Coatzacoalcos no es la excepción con cuatro casos confirmados y 40 más en sospecha, lo que genera todo tipo de dudas, incertidumbre, desconfianza, y ¿por qué no decirlo? Mucho miedo, al grado de que esta emoción nos lleve a cometer imprudencias que generen daños a terceros al no informarse ni verificar adecuadamente la cantidad de datos por los que somos bombardeados a través de What’s App, medios de comunicación y redes sociales.

Se preguntarán por qué salgo a leer esto a través de una transmisión en vivo desde mi fanpage Heder Cabrera, o por qué la leerán en las plataformas digitales y sitios web de las empresas informativas para las cuales trabajo; y la respuesta es la siguiente: He sido objeto de la desinformación, pues mi ausencia de las últimas semanas, mi conocido viaje y regreso de la Ciudad de México, generó una lamentable confusión y que ahora, ha preocupado en primer lugar a mi familia y en segundo plano a mis amistades: hay quienes dan por hecho que soy paciente confirmado o caso sospechoso de Coronavirus, y no, yo no tengo Coronavirus y desacredito al cien por ciento todos esos rumores, chismes y comentarios estériles.

El motivo de mi ausencia en la cobertura noticiosa de Coatzacoalcos, a través de Diario del Istmo e Imagen del Golfo, se debe a que desde hace casi un mes padezco bronquitis aguda, pese a que fui en dos ocasiones a un sanatorio particular, los tratamientos médicos no fueron del todo efectivos; esta situación comenzó a partir del 18 de marzo y tengo una receta de días posteriores para comprobarlo en las páginas de los medios en que laboro.

En efecto, mi viaje a la Ciudad de México, donde acudí a las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador, provocó que mi situación de salud se intensificara, pese a que tomé todas las medidas preventivas como mi medicación, cubrebocas, gel antibacterial y la tan trillada sana distancia.

A mi regreso a Coatzacoalcos, comencé con algunos malestares y tuve que acudir por tercera ocasión al médico, pero ahora al Instituto Mexicano del Seguro Social, donde se me realizó el diagnóstico para descartar el Coronavirus en mi organismo y por mis antecedentes de semanas, en ese momento me enviaron a Rayos ‘X’ a tomarme unas placas, cuyo resultado confirmó que mis bronquios se encontraban muy inflamados, lo que derivó en una bronquitis aguda, que en los anteriores sanatorios sólo me informó como infección en la garganta y

tos.

En la última semana he recibido mensajes de What’s App en los que aseguran que Heder Cabrera tiene sintomatología de Coronavirus por su viaje a la Ciudad de México y que eso es algo que tiene preocupado al gremio periodístico de Coatzacoalcos y no hay nada más alejado de la realidad, pues yo no me llamo Heder Cabrera, para cuestiones periodísticas uso mi nombre completo Heder López Cabrera, mientras que el otro es un seudónimo que ocupo cuando mis tiempos libres me permiten cantar.

Aunque la situación me provoca gracia, en los días recientes no sólo mis familiares ya me preguntaron si padezco Coronavirus, sino amistades de todo tipo, ya que este rumor se esparció de manera irresponsable y en el caso de mis seres queridos, esto ya generó miedo, pues es sabido que en otros lugares de México y del mundo, el revelar nombres de casos sospechosos es motivo de agresiones.

Yo los exhorto enormemente a informarse de fuentes oficiales y de todos los medios de Comunicación que existen en Coatzacoalcos, que ante cualquier mensaje de voz, cadena de What’s App o lo que veamos en redes sociales, siempre verifiquemos la autencidad, pues de nada nos sirve saber en qué hospitales están los pacientes confirmados o sospechosos, ni saber el nombre, ya que si desde el inicio de la contingencia como ciudadanos nunca asumimos las medidas de prevención, ahora menos resultarán al encontrarnos en una fase de transmisión comunitaria, lo que generaremos es que hayan más rumores y que se estigmatice a varias personas, como es mi caso.

De manera responsable y congruente, además por recomendación médica, me encuentro aislado, ya que mi situación de bronquitis me hace más vulnerable a contagiarme si no extremo precauciones.

Yo sé que es difícil creer en las cifras oficiales ante la demora para confirmar los casos sospechosos, pero en nosotros está la valiosa oportunidad de evitar un incremento alarmante de contagios, pues como es sabido, nuestros hospitales no tienen la cantidad suficiente de camas para atender la situación.

Por eso si no tienes por qué salir de tu casa no lo hagas, en caso de que tú seas de esa población que realiza las actividades económicas esenciales procura la sana distancia y lavarte constantemente las manos, además de traer consigo gel o spray antibacterial.

En medida de cómo acatemos las medidas preventivas y el aislamiento, vamos a evitar que la cantidad de enfermos se eleve y que, Dios no lo quiera, terminemos como Nueva York y Guayaquil, en donde los cadáveres están en las calles y apilados en hospitales al quedar rebasados sus sistemas de salud y funerarias, lo que por desgracia fue ocasionado por la inconsciencia de no tomarnos en serio la pandemia.

Infórmate, no caigas en pánico y que este aislamiento te sirva no sólo para aprovechar el tiempo en lectura y otros aprendizajes, sino a

reforzar nuestros lazos de convivencia familiar.

¡Gracias estimados lectores y seguidores de redes sociales!