Duelo por otro tipo de pérdidas

La pérdida de todo ser querido conlleva un proceso de duelo profundamente triste y doloroso en nuestras vidas. Pero no es el único. Hay otras situaciones de la vida que nos hacen atravesar la experiencia de la pérdida con las mismas emociones y sensaciones vinculadas al luto. 

¿Es decir, que podemos experimentar el duelo en distintas etapas de nuestras vidas?

Sí. El ser humano constantemente debe sobrellevar procesos de duelo en distintas situaciones de la vida. Esas emociones negativas y reacciones subjetivas que provocan la pérdida pueden producirse no solo por un ser querido, sino también por otras posesiones afectivas: un empleo, una amistad, una etapa difícil, etc. 

El ser humano experimenta la muerte a través de la pérdida y la separación. Y esto es algo con lo que debemos lidiar constantemente. En todos los casos, requiere que pasemos por un proceso de afrontamiento para restablecer el equilibrio emocional perdido, además de la posterior fase de adaptación y reorganización de nuestra vida. 

Incluso, el nacimiento de un hijo puede conllevar un proceso de duelo para la madre, ya que implica también lidiar con la pérdida con su yo anterior y la posterior fase de readaptación hacia una nueva etapa. Dejar atrás lo que somos y abrirnos a lo desconocido puede ser aterrador, por lo que toda situación que implique cambio drástico o finalización de lo que ocurrió en el pasado, puede involucrar duelo. 

Otras situaciones pueden ser:

• El cambio de etapa de vida (La vejez, la menopausia, la jubilación)
• Pérdida de relaciones humanas (el fin de una amistad, un divorcio, una mudanza)
• Pérdidas patrimoniales (fraude, robo, bancarrota, un nuevo emprendimiento)
• Pérdida de capacidades (enfermedad, amputaciones, etc.)

Lo importante es aprender que en sea cual sea el duelo, es necesario contar con herramientas personales que nos permitan afrontar cada nueva situación de la vida con un nuevo enfoque y sentido de la vida.