| 2024-04-17
Es común que turistas lleguen a la entidad Veracruzana buscando destinos con mar y arena para descansar, pero la realidad es que hay otro tipo de turismo en Veracruz que se maravilla con los lugares cargados de historia.
De los 212 municipios de Veracruz se pueden mencionar tres sitios históricos, naturales que no todos los conocedores del estado saben reconocer de inmediato pero que son una autentica belleza.
Esta zona tuvo Tres Funciones: fue Ciudad con cerca de 15 mil habitantes. Cementerio en el que se hallaron restos de 78 tumbas dispuestas en tres cementerios principales; y Fortaleza, puesto que en todas las estribaciones del cerro se pueden observar muros defensivos de diferentes dimensiones, hecho que causó admiración a los primeros hispanos, por ello lo mencionan en sus relaciones.
Entre las estructuras, se encuentran: el edificio 3; el Cementerio Central; Tumbas 1 y 2; Escalinatas; Plaza Central; las Pirámides 1,2 y 2A; y el Cementerio Oriente.
Se toma la carretera costera Cardel-Nautla (federal 180); en este punto comienza la desviación que llega hasta el estacionamiento principal, cercano a este complejo arquitectónico funerario.
De Poza Rica, se toma la carretera que pasa por Coatzintia y El Tajín hasta llegar a la población de El Chote, de allí se continúa hasta el puente sobre el río Tecolutla; se toma la desviación que conduce a Paso de Correo y dos kilómetros al poniente se encuentra el sitio.
Este asentamiento da la impresión de ser una fortificación por los muros de contención que corren a lo largo de la explanada de norte a sur; su altura que la hace relativamente inaccesible por el poniente, así como el acantilado que la limita al oriente producen el efecto mencionado. El nombre de Cuyuxquihui proviene de la lengua totonaca: cuyu armadillo y quihui palo, madera o árbol; árbol de armadillo, en alusión a un árbol que florece en las montañas inmediatas y cuya corteza es similar a la caparazón de este animal.
Se llega a Poza Rica para después seguir por la carretera 130 hasta la desviación a Zapotalillo. Se continúa hasta el poblado de Castillo de Teayo, donde se encuentra la zona arqueológica.
En este lugar se encontraba una de las antiguas ciudades huastecas. Sus periodos de ocupación van de los siglos X al XII, y durante el periodo Posclásico Tardío se desarrolló en el lugar una fuerte influencia mexica. En el centro de la población hay un edificio de forma piramidal que conserva parte de su estructura completa, de la que destacan la escalinata y la estructura que remata al edificio, dedicada probablemente a un templo, y que es de las pocas construcciones de este tipo que se conservan en el área mesoamericana. En el pequeño museo de sitio se pueden observar esculturas encontradas en los alrededores, cuyos rasgos estilísticos acusan el culto fálico, tan difundido en algunas regiones culturales.