Veracruz | 2022-07-19
Nada como un raspado para refrescarse ante el intenso calor veracruzano y los mejores los prepara doña Guadalupe, quien diariamente se instala en la esquina de Paso y Troncoso y 20 de noviembre a partir de las 12 del día.
Entre los sabores más solicitados se encuentran los de grosella, piña y tamarindo.
"Los jarabes los prepara mi esposo, nos dedicamos a la venta de raspados, glorias, diablitos y esquites desde hace 15 años", confesó la amable y simpática señora.
Con la amabilidad y gentileza que caracteriza a los jarochos la señora dijo que además ofrecen sus servicios para fiestas.
"Los esquites y raspados para fiestas pueden ser un poco más pequeños que estos, o del mismo tamaño, como los damos en la venta diaria", explicó.
Ataviada con una sombrilla en la cabeza para protegerse del intenso sol, doña Lupita, cómo le dicen de cariño, también debe de usar una sillita para poder raspar la pieza de hielo que carga en el carrito.
Aunque es una labor difícil e incómoda, porque se congela la mano, ella lo hace parecer muy fácil, pues con gran destreza y en un dos por tres obtiene las tres cargad del cepillo que necesita para poner en el vaso, que de inmediato le da sabor con cualquiera de los jarabes que tiene como fresa, durazno, guanábana, rompope o limón.
/pn