Perdió parte de su diente por querer grabar video del tornado en Villa del Mar

Jesús Armando esta grabando junto con compañero y no se percató que el tornado venía hacía la zona de la playa, provocando que las mesas y sillas lo golpearan.

Veracruz | 2022-08-14

Por estar de chismoso, Jesús Armando Peña resultó con algunos golpes en el rostro y hasta perdió un pedazo de diente tras el tornado de corta duración que se registró en la zona de Villa del Mar.

Jesús Armando trabaja como mesero en la palapa El Buchaca, el día de la tromba marina que se convirtió en un tornado de corta duración al tocar tierra, comenta que se encontraba laborando. Pese a ser ya tarde, aún se encontraban algunos clientes en las mesas ubicadas en la zona de playa.

Cuenta que cuando observaron la tromba marina, él estaba tan entretenido junto con otro compañero grabando este fenomeno climatico que impresionó a varios, que nunca se percató cuando el remolino se acercó a la zona de tierra.

"Yo estaba viendo con mi vale, grabando ahí, no me dí cuenta que me jaló, por estar de chismoso", admite.

Afirma que en ese momento, en que el viento lo jalaba no sintió miedo.

En tierra este fenomeno climatico se convirtió en un tornado de corta duración pues comentan los meseros que se deshizo al tocar el muro del bulevar.


Tras este hecho Jesús Armando terminó con sangre escurriendo por la nariz y boca.

“Me pegó aquí –dijo al señalarse la mejilla cerca del ojo-, me tiró un (pedazo) diente, el mentón y un rasguño en la frente y nariz”, señaló.

Meseros que tienen hasta 18 años trabajando en palapas de Villa del Mar afirman que es la primera vez que ven un fenomeno de esta naturaleza, el cual les generó temor.

"Cuando ví que empezó a levantar las primeras sombrillas y empezó a levantar todo, salimos corriendo, nos pegamos a la pared, sillas y mesas volaron, a un compañero le lastimó el brazo a otro se quedó de tonto y salió descalabrado pero fue algo horrible que nunca nos imaginabamos fuera ser así de fuerte, pero se desbarató pegando ahí en el muro", relató Aidee Lázaro.

Señalan que hasta los turistas que aun quedaban en la zona se pegaron a la pared para protegerse del remolino.

"Nosotros estábamos aquí grabando porque dijimos 'se va a desbaratar en el agua o tocando tierra', pero nunca pensamos que tocando tierra fuera ... en vivo era un monstruo, estaba grandísimo", dijo la mesera Aidee Cabrera.

/lmr

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