Veracruz | 2020-03-31 | Heladio Castro
Los personajes encargados de hacer reír a niños y adultos son víctimas colaterales del coronavirus, pues las medidas para evitar aglomeraciones alejan a sus destinatarios y no tienen ingresos, afirmó Jesús Pale Valencia, el payaso Rabanito.
Como él, otros personajes y también artistas urbanos trabajan en la vía pública y a veces en fiestas, pero en las noticias sobre el COVID-19 los han dañado porque se les acabó el trabajo.
"Estamos pidiendo más que nada una ayuda porque nuestros lugares de trabajo los han cerrado a causa de la pandemia, es por problemas de salud, y nuestro trabajo cayó en 95 por ciento. No tenemos ingresos para solventar a nuestras familias, y somos casi como 150", explicó.
Pidieron ayuda al ayuntamiento de Veracruz y les ofrecieron llevarlos este miércoles 1 de abril a Xalapa, por lo que deberán concentrarse a las 8:00 de la mañana en el parque Ciriaco Vázquez para abordar el autobús.
"Supuestamente el gobierno federal es el que tiene que dar lo que se requiere (...); de antemano decimos que esto es para que traten de ayudarnos a los payasos: somos padres de familia, vamos al día y si te tapan los caminos, dónde vamos a trabajar", señaló Pale Valencia.
El payaso Rabanito aseguró que en su trabajo él toma medidas sanitarias que no detalló.
Dijo que los payasos toman medidas sanitarias en concordancia con lo que establece la Secretaría de Salud del gobierno federal.
Cabe señalar que a diferencia de hace pocos años, hoy los payasos tienen pocos espacios para trabajar, pues al paso del tiempo les han prohibido sitios como la Macroplaza del Malecón, el Zócalo de Veracruz, el parque Zamora, y tienen que buscar contrataciones para sobrevivir dignamente.