| 2024-06-10
La nueva Aduana Marítima de Veracruz promete un cambio radical, con la adición de 19 nuevos puestos de revisión, ya que se espera agilizar el despacho de mercancías. La obra será inaugurada antes de concluir el sexenio, señaló Carlos Ignacio Morales Tiscareño, director de la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona).
La nueva infraestructura permitirá que los vehículos y mercancías fluyan hacia sus destinos con mayor rapidez y eficiencia, reduciendo considerablemente el tiempo de tránsito para los transportistas.
Explicó que el retraso en las aduanas es multifactorial, por un lado el crecimiento del volumen de carga y por otro el reforzamiento de los temas de seguridad, lo que impacta en las operaciones de carga y descarga en el puerto de Veracruz.
"Es un problema de siempre, el problema de la aduanas y en otras partes en migración, son problemas de siempre, la cantidad de recursos y de transporte que se maneja diario, a veces las condiciones de los puertos y aeropuerto para el trasiego y la insistencia de la delincuencia organizado por tratar de colar sus productos nos hace estar siempre atentos y al frente"
La instalación de equipos avanzados como rayos X y escáneres es una de las mejoras clave de la nueva aduana. Estos equipos no solo garantizarán la seguridad del recinto portuario, sino que también contribuirán a la eficiencia del despacho de mercancías. Se realiza actualmente la fase de licitación para el nuevo alojamiento de la Unidad de Protección Portuaria, que contará con instalaciones propias.
"Esto va a despegar de manera impresionante, no va a haber aduana marítima más grande en el país, que va a permitir que ya los vehículos fluyan hacia su destino, de manera mucho más fácil y el tránsito sea menos tardado para los transportistas".
A pesar de la transición presidencial, descartó cualquier interrupción en los trabajos. Afirmó que la continuidad del proyecto está asegurada debido a su planificación a largo plazo. Además la modernización de la aduana marítima en Veracruz es un paso significativo hacia la mejora de la infraestructura portuaria nacional. Los beneficios esperados incluyen una mayor eficiencia en el manejo de mercancías, reducción en los tiempos de espera y una infraestructura más segura y moderna.