| 2025-06-20
Las lluvias, así sean de un huracán, no contribuyen en forma significativa a recargar los mantos freáticos en las zonas urbanas porque gran parte del suelo es concreto y no permite la filtración del agua superficial al subsuelo, afirmó Agustín Andrade Murga, ingeniero y excolaborador de organismos proveedores de agua potable.
En el caso del reciente huracán Erick que entró al país por la costa de Oaxaca dijo que en Veracruz las lluvias no recargan en gran medida al manto freático.
El manto freático se recarga también de las corrientes subterráneas, que vienen de la parte alta, de las montañas, que es la zona donde más llueve. Incluso los ríos que corren superficialmente, parte de esos ríos hay una infiltración que se va a los mantos freáticos, pero la lluvia no contribuye yo creo que ni siquiera en 30 por ciento a la recarga de los mantos freáticos.
"Y en las zonas urbanas donde hay mucho pavimento también se reduce mucho la infiltración del manto freático. Por eso en el pasado se recomendó un tipo de pavimentación con adocreto, que los fraccionadores por un tiempo lo implementaron porque los obligaban los ayuntamientos, pero actualmente siguen pavimentando con asfalto y hasta con concreto hidráulico", señaló Andrade Murga.
Recalcó que pavimentar con el concreto aunque se diga que es más durable, es peor que el asfalto.
"Las zonas urbanas se convierten en planchas de concreto y todo ese concreto cuando se calienta irradia más calor y la poca lluvia escurre hacia las alcantarillas y finalmente va hacia el mar. Por eso en las zonas urbanas la lluvia no contribuye en forma significativa a recargar los mantos freáticos", puntualizó Andrade Murga.
Hizo hincapié en que se requiere un material que permita que el agua pluvial permee del suelo al subsuelo para contribuir a alimentar el manto freático y que se las aguas superficiales no terminen en el mar sin beneficiar a nadie.