Boca del Río | 2024-01-29
La propuesta para que jueces y magistrados realicen campaña dando a conocer sus argumentos y sean electos por voto ciudadano, es inviable, porque la justicia no es popular, señaló el exprocurador General de la República, Ignacio Morales Lechuga.
En su visita a Imagen de Veracruz, dijo que sería el fin de la justicia porque jueces, ministros y magistrados de la Corte tendrían que ser impulsados por partidos políticos, con infraestructura electoral y con recursos.
“En ese momento los juzgadores estarían obligados a responder a los que los apoyaron. Hace poco en Estados Unidos un juez, electo por voto popular, condenó a muerte a un inocente y dijo que fue porque el sector popular así lo quería. Esto es como pensar que un ejemplo de justicia en el mundo sea la Revolución Francesa cortando la cabeza a todo mundo, sin justicia, ni razón, ni es el ideal de justicia”.
Insistió en que los ministros son electos de manera indirecta, a través de los representantes del país y ha dado resultados.
A su parecer una modificación viable podría ser que, si el Senado rechaza ternas de ministros, los nombre el presidente, pero escogiendo dentro del Poder Judicial local o federal. Es decir, que elija entre magistrados quien sea el sustituto y no de partidos políticos.
Afirmó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) es el único poder que se ha atrevido a hacer valer, defender, y salvaguardar la Constitución, así como los derechos de todos los mexicanos. La autoridad moral de la SCJN se encuentra por arriba de las advertencias de otros poderes, entre ellos el Legislativo, dijo.
Consideró que la presidenta de la SCJN, Norma Piña, no se ha excedido en sus críticas, pues solamente hace valer la ley y lo establecido en la Constitución.
“Yo no le llamaría confrontación, porque para eso se necesita dos partes que estén de acuerdo en pelearse y Norma Piña ha defendido con mesura y con prudencia. Yo creo que ella es un ejemplo de lo que llamamos jurisprudencia, que significa juristas prudentes”.
A su parecer no existe autonomía en el Poder Legislativo, ya que difícilmente modifican iniciativas de la Bancada de Morena.