| 2025-04-15
A sus 38 años, Esmeralda Ixtla aspira a convertirse en magistrada penal federal del Poder Judicial de la Federación. Originaria de Córdoba, con una trayectoria sólida en tribunales estatales y docencia universitaria, ha recorrido en las últimas semanas parte de los 81 municipios que conforman la región Centro-Sur del estado, donde busca el respaldo ciudadano en las urnas el próximo 1 de junio.
"Soy mujer, soy abogada, y creo que el Poder Judicial no solo se puede, sino se debe transformar", afirma. Esmeralda Ixtla participa en esta elección inédita donde la ciudadanía podrá elegir directamente a quienes impartirán justicia. En su caso, compite por una vacante dentro de la especialidad penal federal.
Con boleta en mano, explica a los ciudadanos cómo votar. "La boleta para magistrados y magistradas será de color rosa, y la casilla para aspirantes a materia penal estará marcada en color menta. Ahí encontrarán mi nombre: Ixtla Domínguez Esmeralda, en la posición número seis", detalla durante sus recorridos.
Uno de los retos que ha enfrentado durante la campaña, admite, ha sido la falta de familiaridad de la ciudadanía con el sistema judicial.
"Nos preguntan primero cuándo son las elecciones, luego cómo se vota, y al final qué hacen los jueces y magistrados. Parte de nuestro trabajo ha sido explicar que los jueces resuelven los casos del día a día y los magistrados revisan esas decisiones", comenta.
Con 13 años de experiencia en el Tribunal Superior de Justicia del Estado, un paso por la Secretaría de Seguridad Pública y actualmente catedrática en la Facultad de Derecho de la UNAM, Esmeralda Ixtla defiende la necesidad de acercar el poder judicial a la gente.
"La justicia de papel es una justicia que no se siente. La justicia se tiene que vivir", sostiene. Esa visión la llevó a registrar ante el INE su propuesta de campaña: "una justicia con rostro humano".
Para ella, esta nueva forma de elección implica una transformación profunda del sistema, ya que ahora no se podrá decir simplemente ´el poder judicial es corrupto´, sino que el ciudadano podrá señalar si está o no satisfecho con la persona que le pidió su voto para impartir justicia.
Asume reto electoral
Reconoce que este proceso electoral no está exento de riesgos, pero lo asume como una responsabilidad democrática.
"No solo es pedir el voto, es capacitar a los ciudadanos, escucharlos y ayudarlos a ejercer su derecho a decidir. Nosotros, como personas candidatas, debemos sacar adelante esta elección con la frente en alto", afirma.
La vocación por el derecho la heredó de su padre, un abogado penalista, con quien fue muy cercana desde la infancia. Compartió que su ejemplo despertó el interés no solo por el derecho, sino también por la justicia social.
Por lo anterior inició su formación profesional en el Derecho desde los 17 años, pero también fue la motivación para participar en el proceso judicial cuando vio la convocatoria que se emitió luego de la reforma judicial.
Finalmente, hace un llamado a la participación. "Invito a las y los ciudadanos a confiar en el proceso, a involucrarse, a conocer a quienes aspiramos a impartir justicia. Estoy convencida de que podemos construir un sistema más cercano, más claro y más humano. Espero verlos en los recorridos y, sobre todo, en las urnas".
La elección judicial se realizará el próximo 1 de junio. En cada boleta se elegirá a una persona por especialidad, bajo el principio de paridad de género. Esmeralda Ixtla busca representar a las mujeres desde la magistratura penal del circuito federal.