Veracruz - Boca del Río | 2022-12-20
El frente frío número 18 afectó gravemente la economía de los trabajadores del mar pues al cerrarse el puerto a la navegación marítima cientos de ellos no pudieron obtener el sustento diario para su familia, lamentó Bernardo Hernández Guzmán, presidente de la Federación de Pescadores de Veracruz.
“Este verano que tuvimos aproximadamente 15 días en que hubo bastante producción en comparación con lo que veníamos capturando los últimos 5 años, y al pararse toda la actividad ya no tenemos la producción.
“Y lo peor es que como ya es el final de la corrida del pescado, ya no se aprovecha nada y se puede decir que será hasta principios de marzo cuando se podrá estabilizar un poco la captura”, señaló Hernández Guzmán.
Recordó que todavía en parte del otoño habían tenido buenas temporadas de pesca porque había sierra, peto y cazón en abundancia, lo que fue muy positivo para los pescadores porque les permitía obtener ingresos bastante aceptables para el gasto familiar.
El kilo de sierra para ellos llegó a estar en 30 pesos, mientras que el peto se colocaba en 40 pesos, y en comparación con el periodo de pandemia ya era un avance considerable lo que podían capturar y comercializar en el mercado.
Es decir que todavía entre el 25 de octubre y el 12 de diciembre tuvieron buenas capturas de especies y buena colocación en el mercado; incluso el 12 de diciembre, día de la Virgen de Guadalupe, lograron buenos dividendos de su trabajo en el mar y eso los tenía muy animados.
Ahora con los nortes que cada vez son más intensos tendrán que replegarse en sus viviendas porque sería una locura intentar internarse en el mar y solamente arriesgarían su vida en vano, reconoció el presidente de la Federación de Pescadores de Veracruz.
En consecuencia, aprovecharon el día para sacar sus lanchas del mar y asegurarlas para que no las azote el viento, pues les causaría daños muy graves y el los no disponen de recursos para adquirir una lancha nueva.
“Aseguramos las lanchas, quizás no por el tema de tan duro el viento, pero lo que recala mucho aquí en Veracruz es la marejada y nos causaría pérdidas, por eso tuvimos que asegurarlas lo mejor posible.
“Quienes tenemos un permiso para pescar somos como 800 pescadores, más otro 50 por ciento más, es decir otras 450 personas que no cuentan con permiso pero que también viven de la pesca y también se ven afectados con sus familias”, subrayó Hernández Guzmán.
Dijo que en este momento ya hay un receso entre la corrida de pampanillo que es la que tienen ahora, que viene de norte a sur, en lo que viene la de Cuaresma a partir de marzo, y sería un periodo de ‘rasqueteo’ como ellos le llaman, para sobrevivir mientras vienen tiempos mejores de abril en adelante.
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