Veracruz | 2023-01-07
Con el deceso de doña María Antonia, Doña Toñita como la conocía no termina su incertidumbre, pues el fin de semana no tenían claridad respecto a su futuro.
Suponían que el DIF Municipal de Veracruz se haría cargo del funeral, a falta de algún familiar que se hiciera cargo y porque su hijastro está en prisión, por los malos tratos que le daba en la última etapa de su vida.
Afuera del domicilio de María Antonia no se veía movimiento alguno ni se escuchaba hablar a nadie al respecto.
Una mujer en la calle Democracia entre Urbina y López Velarde, quien la conoció desde hace muchos años, recordó la nula consideración con la que el hijastro trataba a doña María Antonia.
Y el hijastro no lo hacía.
Cómo muchos vecinos, la mujer la apoyó en algún momento de su vida, pero según ella, al pariente no le agradaba que nadie visitara a su madrastra.
En la colonia Nuevas Esperanzas es común que las viviendas se conviertan en bazares dónde se puede vender ropa, zapatos y todo lo imaginable.
Pero también en acopio de prendas usadas.
La mujer plática mientras adentro del espacio donde ella vive se ve ropa, pero no en exhibición como para vender, sino apilada.
En la banqueta y bajo la sombra de un árbol recuerda haber conocido a una supuesta hija de María Antonia, con domicilio en Xalapa
Desde hace tiempo dejó de visitarla y de comunicarse, y no tuvieron forma de contactarla.
El comentario es que seguramente María Antonia ya estaba muy mal, sin comer y sin beber agua y todavía con el maltrato del hijastro.
Así, sola, sin atención ni nada pasó sus últimos años, recordó la vecina.
No se volvió a saber de la supuesta hija.
La vecina opinó que a la anciana la mató la soledad, también el abandono, su salud minada por falta de atención médica y de alimentos, incluso su minada salud mental.
De hecho, dijo recordarla siempre sola, sin familia ni nadie que la proporcionara el calor de un hogar.
Ahora, ya sin vida Antonia, como ella la llama, tiene inciertas sus últimas horas entre los vivos, aunque ya esté muerta, porque seguramente nadie le llevará flores a su tumba... si no es que la incineran.
Reiteró que durante años vio sola a María (no la conocía como María Antonia) y finalmente se va de este mundo.
Y cosas de la vida, a pocas calles de ahí, desde el mediodía parecía una romería de mujeres y niños, pues personal del ayuntamiento de Veracruz y del DIF Municipal, tenía una enorme carpa y bajo su sombra regalaban juguetes por el Día de Reyes.
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