| 2024-12-29
A unas horas de que concluya el año 2024, la Iglesia Católica ha organizado misas para dar gracias por el que se va y para recibir al 2025, el martes 31 de diciembre de 2024 y el miércoles 1 de enero de 2025, afirmó Aurelio Mojica Limón, párroco de la Catedral de Veracruz.
Dejó en claro que sí habrá misas para quienes deseen dar gracias a Dios por un año más y por el alcanzar al año muy, el 2025.
"El día martes 31 de diciembre las celebraciones para dar gracias a Dios por este año que va a terminar serán a las 8:00 de la mañana, 12:00 del día y 6:00 de la tarde; y la misa de fin de año será a las 8:00 de la noche.
"Para el miércoles 1 de enero de 2025, que es una fiesta, celebramos a Nuestra Señora la Virgen María, que es madre de Dios, la celebramos de manera muy especial ese día 1 y será la primera celebración a las 11:00 de la mañana, 12:00 del mediodía, a la 1:00 de la tarde y por la tarde-noche a las 6:00 y a las 7:00 de la noche", explicó Mojica Limón.
Dejó en claro que no nada más es pasar de un día del calendario al siguiente, sino la gracia de alcanzar otro año de vida.
Aclaró que aún no se puede confirmar si el obispo de la Diócesis de Veracruz, Carlos Briseño Arch, oficiará las misas de fin de año y de inicio del siguiente.
"Estamos pendientes porque él, como sabemos, hace unos días falleció su hermana y está un poco en el trámite de algunas cosas, con la familia, que quiere estar un poco con ella, los parientes un poco ya mayores", indicó el párroco de la Catedral de Veracruz.
Hizo hincapié en que el año 2025 está marcado por el Jubileo que propone la Iglesia desde la esperanza, desde esa cercanía y ese volver a Dios.
"Si hay situaciones que no hemos podido superar en todo este tiempo, tenemos la esperanza de que con Dios y con la gracia de Dios podemos ir solucionando todas estas situaciones, pero siempre confiando en Dios y poniendo la esperanza en él: no perdamos la esperanza y sobre todo, la virtud de la esperanza", aseveró Mojica Limón.
Recalcó que el domingo 29 de diciembre es Día de la Sagrada Familia y la Iglesia lo celebra porque es la fiesta de la Sagrada Familia: José, María y Jesús y pone como modelo que los valores cristianos de una familia que vivió, que Dios nació en una familia, pero no dejó de tener situaciones difíciles, problemas como cualquier familia.
"Es modelo de cómo enfrentar las situaciones, los problemas que se van presentando en la vida familiar, que es parecida el diálogo, la comunicación", subrayó el párroco de la Catedral de Veracruz.