Veracruz | 2024-02-12
¡Órale, carnal! Te cuento que en la esquina de las calles Lerdo y 5 de mayo, en el centro de la ciudad de Veracruz, hay un registro que parece ser de la Comisión Federal de Electricidad, pero la tapa de metal ¡está más rota que la relación de mi ex con la buena onda!
Y no es que nomás esté rota, compa, es que tiene un hoyo bien cabrón por el que se puede ir el pie de quien camine por la banqueta. O sea, imagínate, vas caminando tan tranquilo, pensando en tu chamba o en la peda del fin, y de repente ¡zas! Te metes el trompo y te sales cortado con el filo de la lámina.
Pa' acabarla de amolar, al asomarte por ese agujero, ves pura madeja de cables. ¡Qué onda, ya pareciera la cueva de Alí Babá pero sin el tesoro, sólo con el peligro! Y eso ni se diga de la ubicación, mano, porque está en la mera esquina, en plena banqueta. Así que ya sabes, si no quieres acabar como piñata de posada, mejor cambia de acera, ¿no?.
¡La tapa de metal está más perforada que el colchón de la vecina cuando suena la cumbia a todo volumen.
No es un simple agujero, ¡es un cráter! Un hoyo tan grande que hasta se puede meter el pie de aquel que camine despistado por la banqueta. Imagínate la escena: vas trapeando la calle con la mirada, pensando en tus tacos de anoche, y de repente ¡plaff! Te clavas como estaca en ese hueco y, para colmo, te ganas una cortadita con el filo de la lámina oxidada. No te digo, es como una trampa mortal digna de película de terror.
Parece que alguien se metió al vertedero de las conexiones eléctricas y salió corriendo dejando todo tirado. No es un lugar para el paseo dominical, te lo aseguro.
Y pa' rematar, la ubicación es para llorar, compa. Está justo en la esquina, en plena banqueta, donde la gente pasa como en feria. Así que si no quieres terminar más agujereado que un queso suizo, mejor cámbiate de acera y evita el peligro. ¡Ahí te encargo, compadre!