Xalapa | 2022-02-22 | Alejandro García
La administración del exalcalde Fernando Yunes Márquez llevó a cabo la contratación de servicios sin las condiciones de legalidad y honradez, que derivó en una observación de poco más de 17 millones de pesos.
Tal situación la determinó la Auditoria Superior de la Federación (ASF) en el Informe de la Cuenta Pública 2020, donde detectó que las empresas contratadas para el servicio de renta de camiones de volteo presentaron un Registro Federal de Contribuyentes distinto al de la empresa que prestó el servicio.
De igual manera, establece que las empresas contratadas, tanto las del RFC que presentaron como las que realmente brindaron el servicio, se crearon durante el 2020 y de inmediato se les dio un contrato.
La Contraloría Municipal de Veracruz inició el procedimiento para determinar posibles responsabilidades administrativas de servidores públicos y, para tales efectos, integró el expediente núm. INV/JDIRA/008/2021.
La ASF indicó que la administración de Fernando Yunes Márquez no implementó las medidas necesarias para llevar a cabo la contratación de servicios bajo las mejores condiciones de legalidad y honradez, ya que celebró los contratos MVER-FORTAMUN-DF-002-20-PS-02 por 13 millones 574 mil pesos relativo a la contratación abierta del servicio de arrendamiento de 7 camiones de volteo de 7 m³ para las labores diarias a cargo de la Dirección de Servicios Públicos municipales del H. Ayuntamiento de Veracruz con recurso FORTAMUN-DF 2020.
Lo mismo ocurrió con el contrato MVER-FORTAMUN-DF-002-20-PS-03 por 3 millones 880 mil pesos, contratación abierta del servicio de arrendamiento de 3 camiones de volteo de 7 m³ para las labores diarias a cargo de la Dirección de Servicios Públicos municipales del H. Ayuntamiento de Veracruz con recurso FORTAMUN-DF 2020.
Los proveedores que al momento de la contratación presentaron documentación alterada o modificada, ya que la consulta de la opinión del cumplimiento proporcionada por el ente presenta la razón social y el RFC de los proveedores con lo que formalizó dichos contratos; sin embargo, al llevarse a cabo la validación de dichos documentos en el portal del SAT por medio del código de barras bidimensional incluido en estos, los datos arrojados pertenecen a un RFC distinto.