| 2024-11-17
La creciente popularidad de plataformas como SHEIN y Temu, junto con el aumento de las importaciones de ropa de bajo costo procedente de China, representa un desafío importante para la industria de la confección en México.
Flor Campos, diseñadora veracruzana, explicó que estas empresas están ganando terreno al ofrecer productos a precios accesibles, aunque de menor calidad.
"Tenemos este reto hoy en día de grandes marcas que se están consolidando, que al final de cuentas al ser justamente importadas, pues vienen de China, entonces yo creo que ese es el primer reto al que se enfrentan, pero algo que les va a garantizar ir abriendo este camino es justamente encontrar su esencia en el diseño y sobre eso abordarlo".
Señaló que esta competencia desleal afecta directamente a los diseñadores y confeccionistas mexicanos, quienes además enfrentan problemas como el plagio de diseños, la falta de regalías por su trabajo y la presión económica que generan los bajos precios de los productos importados.
"A través de la importación están fomentando justamente esta competencia desleal, incluso ciertos colegas diseñadores se han visto involucrados en el tema ya directo porque les han plagiado sus diseños [...] están replicando un diseño que no es de su autoría".
Frente a esta situación, Campos aseguró que los diseñadores mexicanos deben enfocarse en destacar por la calidad y originalidad de sus productos, ya que competir en precios con las plataformas asiáticas es prácticamente imposible.
Además, exhortó a los consumidores a valorar el trabajo de los creadores nacionales, apostando por prendas diseñadas y confeccionadas en México.
"Compartirlo, difundirlo, porque hoy en día no es malo. Hoy en día al contrario, todo lo que suma al talento local siempre va a ser lo más recomendable, lo positivo y aquello que nos va a ayudar a salir adelante también".
Aunque en Veracruz no se han registrado casos de plagio, Campos mencionó que diseñadores de otras entidades del país sí han enfrentado esta problemática.
También subrayó que el modelo de "fast fashion" tiene un impacto ambiental significativo debido a la producción masiva de ropa y su descarte acelerado.
Con estos retos, detalló la industria de la confección mexicana busca mantenerse competitiva mediante el diseño de alta calidad y el apoyo consciente de los consumidores, quienes desempeñan un papel clave para contrarrestar los efectos del "fast fashion" y preservar la identidad de la moda local.