Veracruz | 2021-11-26 | Mildred Lara
Desde las primeras horas, comentó parte del personal organizador, la afluencia de menores de edad para la aplicación de la vacuna en las instalaciones del estadio Luis Pirata Fuentes, fue muy buena, pues dicen, la fila siempre se mantuvo larga, sin embargo avanzaban con buen ritmo.
Dado que la aplicación sería para menores de 15 a 17 años de edad, el personal constantemente enfatizó que uno de los requisitos para entrar a la aplicación era asistir acompañado por un adulto, por lo que también se pudo apreciar una gran cantidad de ellos en el lugar, principalmente de madres de familia y en algunos casos hermanos.
Algunos rezagados pedían que se les aplicara la dosis de Pfizer como a los menores, sin embargo el personal puntualizó que ellos tenían que esperar por la AstraZeneca, por lo que en ocasiones se mostraron disgustados aunque no mencionaron más.
Las reacciones de los jóvenes ante la vacuna fueron diversas, sin embargo concluían en que es el mejor método para evitar la propagación del virus, pues constantemente salen más variantes. María Alexa Hernández Gómez de 16 años, acudió en compañía de sus primos puesto que dijo, quieren regresar con toda seguridad a la normalidad.
“Yo he visto demasiados chavos y chavas que vinieron a vacunarse pero sé que aún falta otros más y es muy importante que acudan porque es indispensable para cuidarnos y regresar a la normalidad, sobre todo para quienes ya queremos estar en las aulas de clases. Creo que también hay padres, y hasta jóvenes, que desconfían por todos los chismes que en su momento salieron de las vacunas y por eso o no los dejan venir, o no quieren” comentó la menor.
Dijo que aunque parezca increíble, hay muchos jóvenes que se dejan llevar por los rumores que ven en redes sociales, aun cuando saben que no todo lo que aparece en internet es confiable.
María Esperanza de 17 años de edad, invitó a que los jóvenes asistan a vacunarse, pues actualmente un gran número de contagios se da en ellos, además de que aclaró “la vacuna no duele, ni se siente”.