Veracruz | 2023-07-30
La Ciudad Industrial “Bruno Pagliai” en Veracruz se encuentra en deplorables condiciones como consecuencia de la inacción por parte del gobierno estatal y la falta de transparencia en el fideicomiso que la administra, señaló Manuel Liaño Carrera, presidente de Coparmex Veracruz.
A través de un comunicado la Coparmex Veracruz alertó que el pésimo estado de las vialidades con un sinfín de socavones y hundimientos, sin iluminación y falta de vigilancia policiaca son un mal mensaje para la inversión.
“Lamentamos que en los últimos 20 años el crecimiento económico de la entidad ha sido casi nulo, por lo que instamos a nuestras autoridades a atender con prontitud la problemática para incentivar la llegada de nuevos capitales y aprovechar el fenómeno que significa para México la relocalización de industrias a nivel global, donde Veracruz puede tener grandes oportunidades debido a las ventajas geográficas y de conectividad que ofrece”.
Liaño Carrera destacó que la Secretaría de Desarrollo Económico y Portuario (Sedecop) que maneja el fideicomiso de la Ciudad Industrial “Bruno Pagliai” se ha negado a rendir cuentas.
Coparmex Veracruz dijo que la situación es preocupante por ello reiteran su compromiso y voluntad de no permanecer únicamente en la denuncia y hacen un llamado al diálogo para resolver la problemática que enfrenta la zona y avanzar hacia una mayor atracción de inversiones a la entidad.
“A solicitud de nuestros socios asentados en la Ciudad Industrial “Bruno Pagliai”, creamos una Comisión de trabajo específica, con la finalidad de encontrar alternativas de solución a las constantes problemáticas que enfrentan las empresas asentadas en ese corredor económico”, dijo Liaño Carrera.
Ni pareciera que en este lugar se encuentran las fábricas más importantes del estado y el país, los autos o tráileres a su paso levantan una polvareda en las calles, pero cuando llueve se vuelven lagunas.
Todas las vialidades en la Ciudad Industrial están destrozadas, no hay una que se salve; baches, hundimientos, socavones, montañas de escombros, llantas tiradas por todo el camino, banquetas invadidas por maleza, registros destapados, un sinfín de problemas, sin hablar de la poca vigilancia policiaca y fallas constantes en el alumbrado público.