| 2024-12-18
Hace 50 años, la celebración de la Navidad en Veracruz estaba marcada por tradiciones arraigadas en la cultura mexicana, combinadas con influencias regionales propias del estado.
Estas costumbres eran mucho más sencillas y comunitarias en comparación con las festividades actuales, con un fuerte énfasis en la espiritualidad, la convivencia familiar y las expresiones artísticas populares. Aquí te detallo cómo se vivía la Navidad en ese entonces:
Las posadas eran el corazón de la celebración navideña, representando el peregrinaje de José y María en busca de un lugar donde naciera Jesús. Las familias y vecinos se reunían cada noche para recrear la procesión, llevando figuras de los peregrinos y cantando villancicos tradicionales.
Al final de la posada, se rompían piñatas de barro con forma de estrella, simbolizando los pecados capitales. Los participantes compartían alimentos sencillos como tamales, buñuelos, atole o ponche de frutas. Las decoraciones eran modestas y en su mayoría hechas a mano:
Los hogares colocaban nacimientos (pesebres) hechos con figuras de barro o madera, decorados con musgo, ramas y velas.
El árbol de Navidad no era tan común en todas las casas; quienes lo tenían usaban árboles naturales adornados con luces pequeñas, esferas de vidrio y guirnaldas de papel.
En las calles, las luces y decoraciones eran mínimas, pero las comunidades colocaban arcos florales y luces en las iglesias.
La Misa de Gallo era uno de los momentos más importantes de la Nochebuena. Se celebraba a la medianoche para conmemorar el nacimiento de Jesús.
Las familias asistían juntas a la iglesia, vestidas con su mejor ropa, y la misa solía incluir cantos navideños interpretados por coros locales.
La cena era un momento de unión familiar, aunque más sencilla que en la actualidad. Los platillos típicos incluían:
Era común que las familias y vecinos cantaran villancicos al aire libre o durante las posadas. Algunos populares eran:
En las zonas rurales, los niños y jóvenes formaban pequeños grupos para pedir posada o entonar canciones de Navidad a cambio de dulces o alimentos.
Danzas y música jarocha: En las comunidades más tradicionales, se incorporaban bailes y música típica, como el son jarocho, para animar las celebraciones.
Fiestas comunitarias: Las familias organizaban convivios en los patios o plazas principales, compartiendo comida y bebida con vecinos y amigos.
Pastorelas: Se representaban pequeñas obras teatrales que contaban la historia del nacimiento de Jesús y la lucha entre el bien y el mal, con toques de humor.
Intercambio de regalos
El intercambio de regalos no era tan predominante como hoy. En muchas familias, los regalos eran simples y hechos a mano, como juguetes de madera, ropa tejida o dulces típicos.
Los niños solían esperar los regalos de los Reyes Magos el 6 de enero, en lugar de Santa Claus, quien aún no tenía tanta influencia en las costumbres navideñas de México.
Las celebraciones eran más comunitarias que individuales. Las familias compartían alimentos y decoraciones, y los vecinos participaban activamente en las actividades religiosas y culturales.
En las zonas rurales y costeras, la Navidad también incluía momentos de agradecimiento por la cosecha y las bendiciones recibidas durante el año.
La Navidad en Veracruz hace 50 años se caracterizaba por su sencillez, espiritualidad y fuerte sentido de comunidad. Aunque las tradiciones han evolucionado con el tiempo, muchos de estos elementos, como las posadas, la Misa de Gallo y la comida típica, siguen siendo parte importante de las festividades actuales.