| 2022-11-20
El público que asiste a disfrutar el espectáculo en Vie de Cirque, es testigo de la magia que se produce a través de los actos que presentan sus artistas. No obstante, son los mismos artistas quienes se nutren de ella conviviendo con cada uno de los integrantes de la carpa rojiamarilla.
Ejemplo de ello son Iván y Perseo, dos elementos que describen las experiencias y aprendizajes que Vie de Cirque ha ejercido en ellos, tanto profesional como personalmente.
Con gran precisión, Iván Castillo ejecuta un acto de equilibrismo denominado Rolla Bolla, mediante el cual busca el punto exacto para mantenerse estable sobre una serie de cilindros que apila verticalmente, añadiendo movimientos que no sólo agregan complejidad al acto, sino también espectacularidad.
“El Rolla Bolla es un acto que proviene de China, aunque ahora predomina más en Europa. Aquí, en México, es un acto muy poco visto. Lo llevo a cabo desde hace 12 años. De hecho, soy la quinta generación de una familia de circo, por mis padres.
“Es un acto muy bonito, pero muy peligroso al mismo tiempo. Sin embargo, es algo que me encanta hacer y no podría estar más agradecido por pertenecer a Vie de Cirque, luego de haber sido seleccionado entre todos los exponentes que hicimos el casting”, contó Iván.
Su técnica deja maravillado al público, quienes incluso se han acercado a expresarle sus impresiones al término de las funciones, llevándose perspectivas únicas en cada ciudad que visita junto al espectáculo encabezado por los payasos Paquín Jr. y Angelo.
“Los pequeños me han llegado a decir que cuando crezcan quieren ser como yo, que quisieran aprender del Rolla Bolla, que les gustaría estar también en ‘las alturas’ como hago yo. Siento que es la recompensa a tantos años de trabajo y disciplina, sabiendo que pude transmitirles algo mediante mi acto”, agregó.
Emergiendo durante el número musical de Angelo, se suma Perseo Lucero, actor que encarna un papel que contrarresta la energía del payaso Cara Blanca, desarrollando un papel tal y como si se tratara de un “patiño”.
“Realizo el acto final con Angelo, haciendo un acompañamiento durante el número musical, haciendo la parte interpretativa entre la música y la parte escénica.
La técnica que ejecuto es la del clown ‘patiño’ aunque más ‘disuelto’. Es decir, me encargo de contrastar las energías que se encuentran en escena durante el acto.
Convivir con grandes figuras como Paquín Jr. y Angelo, han transmitido a Perseo el anhelo de continuar hasta consolidarse como un payaso de manera integral, tanto de manera teórica como práctica y técnicamente.
“He aprendido cosas increíbles de Angelo y Paquín. Son dos payasos maravillosos, con una técnica europea muy bien definida y ejecutada, tienen mucha ‘limpieza’ y un gran ritmo sobre el escenario. Puedo decirles que para mí son una gran inspiración y, como artista, una enorme aspiración”, concluyó.