| 2025-06-08
En esta temporada de altas temperaturas los perros son altamente vulnerables a los golpes de calor, sobre todo los que están en azoteas sin nada que les haga sombra y podrían morir fulminantemente, alertó Ana María Rivas Sáenz, presidenta de Amo la Vida Grupo Pro Mejora Animal.
Advirtió que persiste esa práctica nociva de personas irresponsables, quienes confinan a la mascota en espacios sin sombra y aunque les ponen agua, ésta se calienta y no pueden tomarla, por lo que están indefensas ante el peligro de las altas temperaturas.
Aclaró que no tiene reportes de muertes causadas directamente por el golpe de calor, pero advirtió que el peligro es latente.
"Con estas temperaturas tan altas puede darles un golpe de calor y es más fácil que le dé a un animalito que a una persona.
Siempre hay que ponerles agua fresca y tenerlos bajo un lugar techado porque ellos son muy vulnerables y debido al pelaje que tienen es más fácil que led dé un golpe de calor y fallecer en pocos minutitos.
"Hasta ahorita no hemos tenido conocimiento de algún caso, pero sí de algunos que han estado a punto de fallecer pero se ha intervenido a tiempo y no dudamos que muchos perritos hayan muerto a causa del calor; por eso es importante que sepan lo peligroso que es tener los animales expuestos al sol, en patios sin techo", puntualizó Rivas Sáenz.
Estimó que una decena de perros sufrió los síntomas del golpe de calor pero por fortuna están vivos y fue una falsa alarma.
NO EMPAPARLOS
La activista por los perros llamó a las personas a no empapar a los perros cuando tienen un golpe de calor, pues podría resultar fatal.
"Mucha gente cree que en esos casos hay que mojarlos, pero no porque eso como que activa el golpe. Lo que hay que hacer es quitarlos del sol, darles agua poco a poco, mojarles la carita poco a poco, pero no empaparlos porque eso sí es muy peligroso.
"Hacemos un llamado a las autoridades de Protección Animal, que estén muy pendientes. Hace días hubo un reporte de un perrito que estaba con láminas, en la azotea, nos dijeron que fueron a ver y que el perrito sí tenía acceso al patio para quitarse del sol y que no había peligro para él", explicó Rivas Sáenz.
Ante cualquier anormalidad sugirió llevar el animal para que lo atienda un médico veterinario.