Albergues de Veracruz sufren constantes robos ante la falta de seguridad

| 2022-04-04 | Josefina Lugo

Desde hace seis meses se ha desatado una ola de robos y asaltos imparable en la Colonia Flores Magón, en donde los ladrones roban en casas habitación, a vecinos de la zona e incluso hasta a los albergues de asistencia social como el albergue “Cuidando un Angelito y “Casa AMANC Veracruz”.

Susana Lara, presidenta de la Asociación Mexicana de Atención a Niños con Cáncer en Veracruz denunció que a la Casa AMANC le robaron el tubo del gas y a varias casas de la cuadra también las despojaron de la tubería de cobre.

“La tubería del gas estacionario bajaba hasta media ventana que está en el área de la administración, aquí se carga gas cada mes, pues los padres de los niños que están en la casa,  cocinan a diario y usan el baño con agua caliente, y pues ya no estaba el tubo. Entonces tuvimos que reponer la válvula del gas y dejarla más alta, en el balcón, ahora el del gas debe usar su escalera”, dijo.

Señaló que otra víctima de los ladrones es otro albergue que se encuentra a la vuelta de AMANC.

“Han robado muchísimo en la colonia, a Maggy Cornejo,  quien tiene el albergue de “Cuidando un Angelito”, también.  Ella lo cerró por pandemia, entonces hace como tres meses comenzó a darle mantenimiento para poder aperturar, puso unos climas nuevecitos y le robaron la parte de arriba, el compresor, que queda en el techo”, lamentó.

Subrayó que la zona está llena de malvivientes, gente que solo anda buscando la manera ilícita de obtener unos pesos para sus vicios.

“Por ahí hay muchos borrachitos, y gente que se mete a la casa abandonada que está enfrente de Casa AMANC, en Iturbide 650 entre Carranza y Flores Magón.  Esa casa yo la reparé, porque le habían quitado los barrotes de una ventana y por ahí se metía una persona, entonces hace poco rompieron el portón y entraba la gente. Hicimos una carta dirigida al jefe de manzana, para que me permitiera repararla y evitar riesgos para los niños y sus familias”, dijo.

Reconoció que esos gastos salen de su bolsillo, pero son necesarios para garantizar la tranquilidad de los pequeños.

“La tuve que mandar a reparar, el jueves de la semana pasada quedó lista. Es una pena que esa casa lleva tantos años abandonada, y sería excelente opción para albergar a los pequeños, pues ya nuestras instalaciones no son suficientes para los niños y sus familias, sobre todo con la pandemia, pues debemos tener menos gente, para protección de todos”, manifestó.

Agregó que a los vecinos de la zona ya les han dado cristalazos, les han robado la tubería de cobre a toda la cuadra, incluso a uno de los vecinos lo asaltaron.

“Ahí afuera de su casa lo agredieron, se bajaron unos individuos de un taxi y lo asaltaron, aprovechando la obscuridad de la noche y la falta de iluminación, pues la lámpara no funcionaba”, afirmó.

Explicó que debido a que la Casa AMANC cuenta con cámaras que graban lo que sucede en la calle, se entera de los robos y atracos pues los vecinos y la policía les solicitan los videos.

“En realidad, la colonia está muy expuesta, sobre todo en calles donde las luminarias no sirven, que es en varias cuadras y eso parece una boca de lobo. De noche se pone muy feo Flores Magón, entre Iturbide y Mina, porque como hay muchos árboles, se obscurece más. También la calle de Carranza está muy fea, porque todos los vecinos se encierran y casi no hay luminarias que funcionen al cien, ese es el problema, las luminarias descompuestas”, aseguró.

Aprovechó el espacio para solicitar la intervención de las autoridades correspondientes, pues los colonos de la zona viven con la zozobra de ser asaltados en cualquier momento.





Fotos: Wencesalao Fuentes/ IMAGEN DEL GOLFO 

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