Soteapan | 2021-11-15 | Staff Imagen del Golfo
Autoridades confirmaron que el cuerpo localizado en proceso de putrefacción en el interior de un tambo en Catemaco, se trató de José Manuel “N” de 17 años de edad, vecino de Soteapan; por este hecho están procesados dos secuestradores detenidos por agentes de la Unidad Especializada en Combate al Secuestro (UECS).
Fue este lunes 15 de noviembre cuando familiares de la victima se presentaron a la unidad del Servicio Médico Forense en Catemaco, para llevar a cabo la identificación del joven hallado el pasado viernes 12 de noviembre, en una casa en construcción, propiedad de uno de los dos detenidos.
Fue el pasado 3 de noviembre cuando se reportó el secuestro del Joven Jose Manuel “N”, por quien exigían una fuerte suma de dinero para liberarlo.
Los familiares habrían sido contactados por los criminales para realizar el pago del rescate, sin embargo, estos dejaron de comunicarse y fue cuando aumentó la preocupación de los padres de José Manuel.
Ante el temor por la vida del menor, los familiares decidieron denunciar los hechos y fue cuando agentes de la UECS iniciaron trabajos de inteligencia hasta establecer la identidad de dos de los presuntos secuestradores y horas después lograr sus detenciones.
La tarde del jueves 11 de noviembre la Fiscalía General del Estado Fiscalía General del Estado daba a conocer sobre la detención de Irving “N” y la empleada del departamento jurídico de la Sspe, Marina “N”, como presuntos responsables del secuestro del joven Jose Manuel “N”.
Se dio a conocer que el Irving “N” aprovechando el lazo de amistad con la víctima, aprovechó para privarlo de la libertad y exigir una fuerte suma de dinero a los familiares para que lo liberaran y respetaran su vida.
Fue hasta el viernes cuando vecinos de la colonia Hernández Ochoa de la ciudad de Catemaco, reportaron que en una obra en construcción ubicada en calle Francisco Villa casi esquina con Gardenia, provenía un olor nauseabundo.
Por lo anterior la Policía Municipal acudió y al inspeccionar el lugar observaron que el olor provenía de un tambo de plástico azul que estaba manchado de sangre.
Ante la presencia de lo que pudiera ser el cuerpo de una persona, la policía realizó el aseguramiento del lugar y solicitó la presencia de las autoridades ministeriales, quienes horas más tarde confirmaron que se trataba del cadáver putrefacto de una persona del sexo masculino.
Días después se logró saber que la casa en construcción era propiedad de Irving “N”, uno de los detenidos en el secuestro, lo que habría hecho sospechar a las autoridades que la persona muerta sería el menor de edad, versión que finalmente fue confirmada oficialmente.