Vega de Alatorre | 2020-12-17 | Thelma Valerio
Dos veces la impunidad venció: dos veces un sujeto ligado a actividades de grupos criminales en el norte de Veracruz quedó sin castigo por su presunta relación con desapariciones en la entidad y hasta el momento las autoridades se niegan a indagarlo.
El 14 de marzo del 2014, Antonio de Jesús Viveros Ladrón de Guevara salió de su domicilio a las 7 de la mañana rumbo a Vega de Alatorre. Jamás volvió a su hogar. El joven le aseguró a Rosa Helena, su madre, que se pondría en contacto en la noche para avisar sobre su llegada. Nunca volvió a hablar con ella.
Los familiares de Antonio de Jesús intentaron ponerse en contacto con él, sin ningún éxito. Al salir a su búsqueda, vecinos del joven les informaron que criminales armados entraron a su hogar y se lo llevaron en una camioneta blanca, de doble cabina.
Poco después, testigos de los hechos revelaron a Rosa Helena algunos nombres de los implicados en la desaparición.
Entre los criminales figura un hombre que pisó la cárcel por el delito de portación de armas del Ejército y que, actualmente, se encuentra bajo arresto por robo de vehículo.
No obstante, las autoridades se niegan a acusar al sospechoso directamente por la desaparición de Antonio de Jesús. El delito sigue impune, hasta el momento. El caso no avanza. Los principales encargados de la investigación, para dar con el paradero del joven, han sido la madre de Antonio y sus familiares.
Rosa Helena confirmó que, luego de la desaparición, fueron halladas bolsas con restos humanos en el interior, por lo que se le informó al fiscal encargado del caso, quien negó la existencia de algún cuerpo.
La investigación que realizó la familia arrojó que, presuntamente, los cuerpos fueron llevados por las autoridades al panteón municipal, en calidad de desconocidos. Y, respecto a esta situación, aún no se encuentran a los responsables de realizar esta investigación.
Tras un año de desconocer el nombre del fiscal encargado de ‘dar carpetazo’ al caso de los restos humanos encontrados, la única respuesta que ha recibido Rosa Helena por parte de las autoridades es que ‘aún no tienen los estudios de ADN suficientes’.
El sospechoso principal de la desaparición, quien actualmente permanece tras las rejas por segunda ocasión, salió el año pasado ‘exonerado’ por el delito de posesión de armas del Ejército. Existe el temor de que vuelva a salir libre. La impunidad gana, muchas veces. Tal vez en la mayoría de las ocasiones.
‘Las autoridades nos dijeron que no lo pueden obligar. Es bien triste que ellos si tengan derechos y que nuestros hijos no los tengan, que nuestros hijos permanezcan en calidad de desconocidos y que nosotros, como víctimas indirectas, vivamos con esta incertidumbre’, expresó Rosa Helena, con la voz entrecortada.
Rosa Helena confesó que lo que la mantiene en pie de lucha es la esperanza de encontrar a su hijo con vida y conocer la verdad sobre lo que le ocurrió, pues ningún ser humano merecer vivir con un dolor tan profundo.
‘Hijo aquí estoy y siempre te esperaré, toda la vida. Estás aquí a mi lado, te amo muchísimo’, expresó Rosa Helena, la madre valiente y amorosa que busca a su hijo Antonio de Jesús.