México | 2022-08-19
Tras la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y que la investigación quedó a cargo de la entonces extinta Procuraduría General de la República (PGR) al frente de Jesús Murillo Karam, se inmortalizó con la icónica frase de “Ya me cansé”.
Jesús Murillo Karam estuvo al frente de la PGR durante el sexenio del expresidente de México, Enrique Peña Nieto; fue el pasado 7 de noviembre de 2014 cuando estaba realizando una conferencia de prensa para dar a conocer la investigación que se llevaba por los restos humanos hallados en la zona de Cocula, Guerrero que presuntamente estarían ligados a los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Sin embargo, la frase que le dijo a los medios de comunicación fue “Ya me cansé”, esto cuando daba por terminada la conferencia, creyendo que el micrófono estaba apagado, pero aun se podía registrar su voz.
Aunque muchos aludieron a que la icónica frase se debía por las investigaciones y las reuniones que tenía con los padres de los normalistas de Ayotzinapa, Jesús Murillo Karam indicó en una entrevista para el medio Grupo Imagen Multimedia que estaba cansado, argumentando que era solo cansancio físico el que tenía y no por la investigación.
También añadió que “nunca digo mentiras. A veces no digo todas las verdades, pero nunca digo mentiras” sin embargo fue cuando señaló que esto formaba parte de los estragos que dejaba el realizar la investigación por los desaparecidos la noche de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
Durante esa entrevista, Murillo Karam indicó que tenía 40 horas de no haber dormido, y solo haber dormido 4 horas durante el mes en que llevaba la investigación.
Sin embargo, para algunos medios de comunicación esta frase se debió a las interrogantes a las cual estaba siendo sometido Jesús Murillo Karam respecto a si había participación o no de funcionarios dentro de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Cabe recordar que Murillo Karam fue detenido este viernes por agentes de la Fiscalía General de la República (FGR) esto tras su presunta vinculación con la desaparición de los normalistas en Iguala, Guerrero en 2014.
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