México | 2022-04-01 | Judith Sánchez Reyes
El presidente Andrés Manuel López Obrador calificó como respetuosa la reunión con John Kerry y el grupo de empresarios estadounidenses.
En La Mañanera, el jefe del Ejecutivo federal descartó que en el encuentro de ayer se hayan abordado las opiniones de la representante comercial, Katherine Tai, sobre las posibles acciones contra México en caso de no proteger a las empresas de Estados Unidos e impactar el medio ambiente por la Reforma Eléctrica.
-¿No salió a colación?, se le cuestionó.
"No se trató nada de eso. Fue una reunión respetuosa. No hubo quejas airadas de maltrato en ningún caso.", respondió a Imagen del Golfo.
Recordó que la primera vez que visitó la Casa Blanca, en el periodo de Donald Trump, en una cena el dueño de Sempra planteó se le otorgara el permiso para una planta de licuefacción en Ensenada, se analizó y se llevó a cabo una consulta y la gente votó a favor, lo que atrajo inversión a esa zona.
Entonces, el primer mandatario afirmó que Kerry le agradeció que se resolviera el caso de la empresa Sempra.
“Sempra, que es una empresa fuerte, es de las empresas del sector energético más importantes de Estados Unidos, vino a agradecernos porque lo hemos atendido”.
En la misma postura estuvieron los dueños de la empresa Talos, “que vinieron, hicieron su planteamiento, se les propuso lo que aquí ya vimos y lo van a analizar, y el propósito es que se pongan de acuerdo con el director de Pemex”.
Añadió que grandes empresas como Ford o General Motors no manifestaron molestia alguna, contrario, “vinieron a decirnos de que está invirtiendo en el país”.
López Obrador enfatizó la disposición de las empresas estadounidenses a entender el contenido de la reforma en materia eléctrica y estaban “muy contentos”.
Indicó que los empresarios del vecino país del norte están receptivos a la Reforma Eléctrica, pues se le dejó en claro que México está dispuesto a atender a las empresas del sector energético de Estados Unidos sin actuar de manera injusta y arbitraria.
Además, de que en el Gobierno Federal “existe disposición al diálogo. No queremos dejar de tener buenas relaciones con el gobierno de Estados Unidos, ni con las empresas de ese país, porque consideramos que es imprescindible y benéfica la integración económica y comercial entre las dos naciones con respeto a nuestras soberanías y sin permitir actos ilegales, influyentismo y corrupción. Entonces, vamos a continuar así”.
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