Ciudad de México | 2022-09-27
Al ser considerado el 'mes del testamento’, durante septiembre un gran número de notarios ofrecen descuentos a los ciudadanos que deseen realizar este trámite, por lo que muchos aprovechan para dejar por escrito la herencia de sus bienes. Pero, ¿qué pasa si falleces y no dejas testamento?
Es común que una persona fallezca y, al no haber realizado este trámite, sus bienes queden intestados; sin embargo, debes saber que esto puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza para los familiares que pretendan apoderarse de la herencia.
Primero, hay que aclarar que la creencia de que los bienes intestados pasan a ser parte del Gobierno, es falsa; sin embargo, esto sí puede derivar en un conflicto familiar, pues para repartir los bienes del difunto tiene que abrirse un juicio intestamentario, en el que muchas veces un hijo o familiar alega más derechos como pago por los cuidados prestados o por la inversión en algún inmueble del finado.
De acuerdo con las leyes actuales, la herencia intestada se distribuirá entre sus familiares más cercanos, aunque la preferencia la tendrán, en primer lugar, los hijos y cónyuge; en segundo lugar, los nietos de hijos fallecidos, los padres (cuando no hay hijos), los hermanos, los sobrinos, primos y demás familiares hasta el cuarto grado de parentesco.
El juicio puede llevar desde meses hasta décadas, según la conciliación entre cada familiar, por lo que otra opción para repartir la herencia es mediante una tramitación ante un notario, aunque esta únicamente podrá hacerse si todos los herederos están de acuerdo.
Solo en caso de no existir cualquiera de los familiares mencionados, entonces los bienes sí podrían ser donados a la beneficencia pública.