México | 2024-12-05
La conexión entre el estado físico y mental es más poderosa de lo que parece. Un cuerpo bien nutrido y fortalecido responde mejor a los tratamientos, mientras que una mente en equilibrio te ayuda a navegar las emociones que surgen en el proceso.
Por ello, prepararte de manera integral para un tratamiento de fertilidad, incrementará tus posibilidades de éxito y transformará la experiencia en una oportunidad para que seas más consciente de ti.
¿Estás por someterte a uno de estos procedimientos? Entonces quédate a leer las siguientes líneas para que descubras algunas estrategias que te permitirán enfrentar con confianza un momento tan importante en tu vida.
Alimentación, descanso y movimiento
Prioriza alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y verduras frescas para proteger tus células, incluyendo las reproductivas; también añade grasas saludables como las del aguacate, nueces y aceite de oliva, fundamentales para la regulación hormona, así como proteínas magras y cereales integrales que te aportan energía.
En cuanto al ejercicio, opta por actividades como yoga o caminatas con el fin de que estimules la circulación sin generar estrés en tu organismo. Por supuesto, procura tener un descanso adecuado, pues dormir bien regula hormonas vitales para la fertilidad y anima a tu cuerpo a regenerarse.
Aunque la incertidumbre y la ansiedad son algo común durante los tratamientos de infertilidad, existen maneras para que las gestiones: Empieza por identificar fuentes de estrés en tu vida diaria, ya que, a veces, cambios sencillos como delegar responsabilidades o dedicar un momento al día solo para ti, te harán sentirte diferente.
Practicar meditación o hacer ejercicios de respiración consciente son técnicas útiles para calmar la mente y reducir los niveles de cortisol, hormona que puede interferir en el proceso al que sometas.
Aunque se piensa que trabajar en una mentalidad positiva significa ignorar los desafíos, en realidad, la intención es aprender a enfrentarlos desde un lugar de resiliencia. Para reforzar tu confianza, busca afirmaciones y dedica tiempo a actividades que disfrutes; si sientes que tus emociones se desbordan, considera buscar apoyo en un terapeuta especializado.
Un plan que responda a tus necesidades
Cada cuerpo es único, y lo que funciona para alguien más, puede no ser lo ideal para ti, por eso, es importante que aceptes someterte a evaluaciones que incluyan análisis hormonales, estudios de salud general y pruebas varias con el objetivo de determinar el enfoque que mejor se adapte a ti.
Un profesional de confianza te orientará sobre los aspectos técnicos del tratamiento, como sucede con los medicamentos, cuya prescripción debe incluir explicaciones de uso, cómo funciona, cómo dosificarlo y aplicarlo. Por ejemplo, al recetarte Merapur, el médico te hablará de su precio para que planifiques tus gastos y evaluar posibles alternativas.
Asimismo, el experto tendrá en cuenta factores emocionales y físicos para ajustar el plan a tu estilo de vida; sin embargo, no temas plantear tus dudas o inquietudes, por pequeñas que parezcan. Tener claridad sobre lo que está sucediendo y lo que puedes esperar te permitirá enfrentar el proceso con mayor confianza.
Pequeños cambios para alcanzar grandes resultados
● Organiza tus horarios: Establece tiempos específicos para tus comidas, ejercicio, momentos de descanso y citas médicas. A partir de una estructura, sentirás que tienes el control sobre tu día.
● Crea un espacio en tu hogar que invite a la calma: Puede ser una habitación o un rincón donde te sientas bien. Añade elementos que te relajen, como plantas, luces o música tranquila. Conviértelo en tu refugio para meditar, leer o desconectarte cuando lo necesites.
● Identificar recursos confiables: Un buen punto de partida es investigar a los proveedores de cualquier aspecto relacionado con tu tratamiento, desde clínicas, laboratorios y farmacias de fertilidad, como Fertifarma, una opción que se destaca por su profesionalismo, al igual que por su servicio al cliente.
● Simplificar tareas cotidianas: Por ejemplo, planificar tus comidas con antelación o apoyarte en herramientas digitales para organizarte te quitará un enorme peso de los hombros.
Quédate cerca de la gente que amas
Tu círculo más cercano, como pareja, familiares o amigos, serán un gran soporte si compartes con ellos tus pensamientos; libera todo lo que sientes para que sean capaces de entenderte y buscar maneras de brindarte apoyo.
Solo elige con cuidado a las personas en las que confías, rodéate de aquellos que te den comprensión y ánimo, en lugar de que te bombardeen con críticas, o bien, con consejos no solicitados.
Y, como ya lo señalamos en párrafos anteriores, el apoyo de terapeutas no está de más; incluso interactuar con gente que atraviesa experiencias similares puede generar comprensión y reducir la sensación de aislamiento.
Nuestro artículo no busca dar fórmulas exactas, porque no las hay, pero sí ofrecer una guía para que encuentres el modo de escuchar a tu cuerpo, atender tus pensamientos y rodearte de apoyo.
Aunque los procedimientos de fertilidad traen consigo incertidumbre, también están cargados de esperanza y posibilidades de que cumplas tu objetivo de tener una familia. ¡Esperamos que toda la información que te brindamos en verdad te sea útil!