México | 2024-06-23
En México, cada 24 de junio, Día de San Juan, es común escuchar que llueve. Este fenómeno, que muchos consideran un misterio o un hecho espiritual, tiene una explicación más terrenal que te sorprenderá.
Acompáñanos y descubramos juntos por qué se dice que siempre llueve en este día especial.
México es un país mayoritariamente católico, y el Día de San Juan, que conmemora el nacimiento de San Juan Bautista, es una fecha importante. Sin embargo, lo que llama la atención es que casi siempre llueve este día.
Pese al misticismo que rodea a la cuestión, la creencia podría tener más que ver con la temporada de lluvias que con cuestiones espirituales.
El día 24 de junio en que se celebra esta tradición traída a México por los españoles coincidiría con la temporada de lluvias en el país, que va de mayo a septiembre.
Durante este periodo, las lluvias son frecuentes debido a la influencia de huracanes y ciclones.
Es fácil pensar que la lluvia del 24 de junio tiene un origen místico, pero la realidad es más sencilla. El clima en México durante junio está marcado por la alta actividad de lluvias.
San Juan Bautista es una figura central en la religión católica. Hijo de Zacarías e Isabel, quienes según la Biblia, no podían tener hijos hasta que el arcángel Gabriel les anunció que serían padres de quien prepararía el camino para Jesús.
Juan Bautista nació seis meses antes que Jesús y se le reconoce por bautizar a muchas personas, incluido Jesús mismo.
Antes de la llegada del catolicismo, los pueblos indígenas en México veneraban a Tlaloc, el dios de la lluvia. Las fiestas en honor a Tlaloc también se celebraban en los meses de junio a septiembre, coincidiendo con la temporada de lluvias.
La mezcla de estas dos tradiciones, la católica y la indígena, ha fortalecido la creencia de que siempre llueve el Día de San Juan. Así, la coincidencia entre la celebración del Día de San Juan y la temporada de lluvias ha dado pie a esta creencia popular.
Ahora ya lo sabes, la próxima vez que llueva el 24 de junio, Día de San Juan, recordarás que no se trata de un evento sobrenatural, sino de una coincidencia climática.
No obstante, cabe reconocer que esta tradición es una hermosa mezcla de historia, cultura y naturaleza que refleja la rica herencia de México.