Ciudad de México | 2023-12-11
La Virgen de Guadalupe tiene feligreses de todas partes del mundo, pero México es el país que más fe tiene en esta imagen sin importar estratos sociales.
Solo basta ver la Basílica de Guadalupe, uno de los templos de la iglesia católica con más peregrinos después de la Basílica de San Pedro en Roma.
La historia del ‘Acontecimiento Guadalupano’ narra que la Virgen de Guadalupe se le apareció en cuatro oportunidades al indígena Juan Diego, a quien le pidió en 1531 subir al Cerro del Tepeyac, recolectar varias flores con ayuda de su tilma y llevárselas al obispo.
Al cumplir con la petición para demostrar la prueba de la existencia de tal Virgen, Juan Diego extendió su tilma y allí quedó grabada la imagen de una virgen morena con rasgos mestizo, convirtiéndose desde entonces en uno de los elementos más importantes del catolicismo.
Una imagen que no se salva de teorías al detallar con lupa cada característica.
Aunque se cree que la imagen de la Virgen de Guadalupe fue alterada debido a las diferencias encontradas en la representación de siglos atrás con la actual, donde, la corona que llevaba la original se eliminó en el siglo XIX, sin explicación alguna, uno de los elementos que más curiosidad causa son sus ojos.
La ilustración ha sido estudiada por distintos especialistas, como el Dr. Enrique Graue, el cual aseguró que encontró que la pupila de la virgen se contrae y dilata de acuerdo a la luz que recibe, como ocurre con los ojos reales.
Además, se logra ver el reflejo de algunas figuras humanas en sus ojos, se habla de 12 o 13 personajes, que se cree, pueden ser los testigos del milagro cuando San Juan Diego mostró su ayate.
Desde el año 1950 los ojos de la Virgen de Guadalupe han sido examinados por una veintena de especialistas.