| 2024-12-26
La reconocida cantante mexicana Dulce dejó una marca indeleble en el mundo de la música y en la vida de quienes tuvieron el privilegio de conocerla. Su trayectoria estuvo repleta de logros y su vida amorosa acaparó titulares, pero su legado más significativo se encuentra en su única hija, Romina Mircoli. Vamos a descubrir más sobre Romina y la herencia que recibió de su madre.
Romina Mircoli nació en 1987, fruto del matrimonio entre Dulce y el productor musical Luis Mircoli, quienes se casaron en 1986. Aunque su unión finalizó en 1995, Romina continuó siendo la única descendencia de la artista.
A diferencia de su madre, Romina eligió llevar una vida alejada del espectáculo, manteniéndose en un perfil bajo mientras formaba su propia familia. A pesar de algunas diferencias pasadas entre ellas, especialmente relacionadas con las decisiones amorosas de Romina, su relación mejoró notablemente a partir de 2019, cuando Romina se convirtió en madre. La llegada del nieto fortaleció los lazos familiares y les permitió acercarse más.
En cuanto a la visión que tenía Dulce sobre su legado, no solo fue una artista excepcional, sino también alguien que valoraba profundamente lo que significaba dejar una herencia. En diversas entrevistas, expresó que deseaba que su legado fuera mucho más que posesiones materiales.
Para ella, su mayor tesoro era su voz, un talento que marcó su existencia y carrera.
"Te puedo dar todo lo que tengo mañana sin dudarlo, porque lo más valioso me fue otorgado al nacer", comentó en una charla en un video.
Además, Dulce reveló que estaba trabajando en grabaciones exclusivas de su voz sin acompañamiento musical para Romina. Estas grabaciones podrían ser utilizadas en futuros proyectos musicales, brindándole a su hija la oportunidad de comercializarlas y obtener beneficios económicos.
Dulce dijo que su deseo era que su hija Romina pudiera continuar construyendo su vida, gracias a su voz.
"Mi voz es lo que se queda. Es mi don, y quiero que mi hija lo use si alguien lo valora, ya sea en cumbia, ranchero o cualquier género que prefiera. Esto es lo que puedo dejarle: el milagro que Dios me dio".
Cabe mencionar que Romina Mircoli no solo heredará los recuerdos de su talentosa madre, sino su legado artístico, donde ella será la única que podrá darle uso a su voz a través de grabaciones que le dejó.
Por lo que Dulce seguirá viva en su música y en el corazón de su hija, dejando un gran testimonio de amor, talento y trascendencia.
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