| 2024-10-30
Los fenómenos astrales y la formación de nubes siempre será una incógnita al momento de entender cómo es que llegan a tener una forma o que no cambian de posición, una extraña nube que ha aparecido en el cielo es Taieri Pet, la cual, según expertos, esta no cambia de lugar.
Una formación nubosa inusual, conocida localmente como "Taieri Pet", ha captado nuevamente la atención de científicos y residentes tras ser fotografiada el pasado 7 de septiembre de 2024 por el satélite Landsat 8 de la NASA.
De acuerdo con expertos, esta nube, que aparece regularmente sobre la región de Otago, entre Middlemarch y Hyde en la Isla Sur de Nueva Zelanda, se ha convertido en una especie de "mascota" para los habitantes, dado su aspecto distintivo y ubicación constante.
La extraña nube cuenta con una longitud de alrededor de 11.5 kilómetros, sin embargo, esta no es un fenómeno paranormal, sino un altocúmulo lenticular alargado, como explican meteorólogos de la NASA y del MetService de Nueva Zelanda.
Esta surge cuando los vientos del noroeste se encuentran con la cordillera Rock and Pillar Range, produciendo una corriente de aire que hace que la nube se mantenga estática en el cielo.
Desde un perfil lateral, el Taieri Pet exhibe una serie de capas definidas, que algunos comparan con una "torre de panqueques" o "platos" flotando en el aire, alcanzando varios cientos de metros de altura.
Las nubes lenticulares, como esta, se forman cuando el aire es empujado a través de una cadena montañosa y asciende, generando una onda estacionaria en la atmósfera. En la cresta de esta onda, el aire se enfría y el vapor de agua se condensa, dando forma a nubes de bordes suaves y bien definidos.
El aspecto peculiar del Taieri Pet ha llevado a algunos a asociarla con avistamientos de ovnis, un fenómeno común en nubes lenticulares, según la Oficina Meteorológica del Reino Unido.
Sin embargo, estas nubes también pueden indicar condiciones atmosféricas turbulentas, lo que representa riesgos de turbulencia y formación de hielo para la aviación.
Aunque estas nubes suelen asociarse con cambios meteorológicos y lluvias, el Taieri Pet no necesariamente marca estas condiciones.
Así, esta "mascota" atmosférica se une a los paisajes únicos de Nueva Zelanda, que, además de ser escenario de películas fantásticas, muestran cómo la naturaleza puede ser igual de sorprendente que la ficción.
/lmr