Ginebra | 2021-01-20 | Agencia AFP
La variante británica del coronavirus continúa propagándose por todo el mundo y la semana pasada estaba presente en 60 países y territorios, es decir 10 más que el 12 de enero, informó este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La variante sudafricana que, al igual que la británica, es mucho más contagiosa que el virus SARS-CoV-2 original, se propaga más lentamente y está presente en 23 países y territorios, o sea tres más que el 12 de enero, precisa la OMS en su revisión epidemiológica semanal.
La OMS también afirma que sigue la propagación de las dos otras variantes surgidas en Brasil, el P1, que apareció en el estado de Amazonas y también se detectó en Japón en 4 personas llegadas de Brasil, y otra cepa.
"Actualmente hay poca información disponible para evaluar si estas nuevas variantes modifican la transmisibilidad o la gravedad", señala la agencia de la ONU, pero subraya que sus características genéticas similares a las variantes británica y sudafricana hacen que se necesiten estudios adicionales.
La variante británica de la que se informó a mediados de diciembre a la OMS se considera entre un 50 y 70 por ciento más contagiosa que el nuevo coronavirus original. Está presente en las seis zonas geográficas de la OMS, mientras que la sudafricana solo se halla en 4 de ellas, recalcó la organización sin especificar cuáles.
Estas dos variantes, mucho más contagiosas, no son a priori más peligrosas, según el estado actual de la investigación, pero como las personas pueden caer enfermas con más facilidad, aumenta la presión sobre los sistemas sanitarios, que en algunos países como Reino Unido o Estados Unidos a veces están desbordados.
También se plantea el tema de la eficacia de las vacunas contra estas nuevas variantes, pero hasta ahora nada demuestra que los productos utilizados sean menos eficaces.
Además, los laboratorios han asegurado que pueden proporcionar rápidamente nuevas versiones de su vacuna si fuera necesario.
La pandemia del nuevo coronavirus ha causado más de dos millones de muertos. La OMS afirma que el número de fallecimientos aumentó un nueve por ciento en la semana que terminó el 17 de enero con relación a la semana anterior, alcanzando un récord de 93 mil.