China | 2024-08-29
En un comunicado emitido recientemente, el Ministerio de Exteriores de China ha solicitado a Estados Unidos que cese sus políticas de "intervencionismo" en América Latina y que promueva relaciones basadas en "el respeto mutuo" y "la no injerencia en los asuntos internos" de cada país.
Esta declaración fue realizada por Lin Jian, portavoz del ministerio, quien subrayó que, aunque Estados Unidos haya declarado el fin de la Doctrina Monroe, las acciones hegemonistas derivadas de esta doctrina persisten y continúan siendo una barrera para la autonomía de las naciones latinoamericanas.
Durante una rueda de prensa, Lin Jian enfatizó el apoyo total de China a las naciones de América Latina en su lucha contra las "interferencias extranjeras" provenientes de Washington.
El portavoz destacó que las tácticas unilaterales de Estados Unidos, que incluyen sanciones y bloqueos, no solo son impopulares, sino que también están destinadas a quedar en el pasado.
China, por su parte, abogaría por la construcción de relaciones internacionales que se fundamenten en la igualdad, el respeto mutuo y la no injerencia en asuntos internos.
La declaración de China se produce en un contexto donde varios líderes latinoamericanos, incluidos el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador y la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, han expresado abiertamente su oposición a las políticas de intervención de Estados Unidos.
López Obrador, por ejemplo, recientemente puso en pausa las relaciones diplomáticas con Washington en respuesta a las críticas del embajador estadounidense, Ken Salazar, sobre la reforma judicial en México. Estas posturas reflejan una creciente resistencia en la región contra las acciones unilaterales de Estados Unidos.
China ha hecho un llamado a Estados Unidos para que abandone la obsoleta Doctrina Monroe y se enfoque en desarrollar una cooperación mutuamente beneficiosa con los países de América Latina.
Según Lin Jian, la hegemonía y las relaciones de poder que caracterizan la política exterior de Washington están en contra de la tendencia histórica de los países latinoamericanos hacia la independencia y la unidad regional.
Esta firme posición de China no solo refleja su apoyo a la soberanía latinoamericana, sino también su deseo de promover un orden internacional basado en el respeto y la igualdad, alejándose de las prácticas intervencionistas que han marcado la política exterior de Estados Unidos en la región durante décadas.