Los Ángeles | 2021-07-04 | Agencias
A sus 85 años, Julie Andrews sigue conservando su lugar como leyenda de Hollywood. Recientemente fue la voz que cuenta la historia de ‘Bridgerton’, una de las series más vistas de Netflix. Y con esa misma voz que solía estar detrás del rol del filme animado ‘Shrek’ o en las canciones de ‘Mary Poppins’ o ‘La Novicia Rebelde’.
“Mantengo la misma pasión que tenía al inicio de mi carrera. Me entusiasma cada proyecto que arranco. Estoy empezando a dirigir y ahora estoy pensando en producir. Y como en ‘Bridgerton’, ahora trabajo mucho solo con mi voz. Es la parte que más me encanta, porque no tengo que peinarme ni maquillarme. Sigo disfrutando mi trabajo, igual que el primer día.
Trayectoria
El acento británico que la hizo famosa, viene de la ciudad Walton, en Thames, donde Julia Elizabeth Wells, nació a las 6 de la madrugada del 1 de octubre de 1935. Desde joven destacó al cantar. A los 20 años debutó como actriz de teatro en La Cenicienta en el London Palladium, para viajar después a Broadway con la versión teatral de ‘My Fair Lady’.
Julie Andrews ya era considerada una estrella cuando protagonizó ‘La novicia rebelde’, pero fue al lado de su marido, el director Blake Edwards, que logró alejarse del estereotipo de Mary Poppins y La novicia rebelde, con las películas ‘Victor Victoria’ y ‘10’.
Trabajó con Peter Sellers en una versión de ‘La Pantera Rosa’. El público disfruto su voz hasta que le dañaron las cuerdas vocales en una operación, en 1998. Ganó una demanda de 30 millones de dólares, al hospital Mt. Sinai, de Nueva York.
Incluso estuvo en una clínica siquiatra para superar el trauma de no poder cantar como antes. Después trabajó en el ‘Diario de la princesa’, junto a Anne Hathaway, posteriormente pudo volver a cantar en el cine gracias al milagro de la ciencia que reemplazó sintéticamente sus dañadas cuerdas vocales que hoy aprovecha al máximo Netflix con el rol de ‘Lady Whistledown’ en la serie ‘Bridgerton’.
“Ya no canto igual, porque tuve una operación que me quitó la voz. Pero trato de encontrar una forma de llevar la música a todo lo que hago. Como con los libros que escribo con mi hija. Hacemos los paquetes con música y si podemos, los escribimos teniendo la música en mente. Es algo que imagino todo el tiempo. Pero extraño mucho cantar, especialmente cantar con una gran orquesta. No hay nada igual. Cantar es fenomenal”.
Motivación
Al recordar su trabajo en Victor, Victoria confesó que se la pasó estudiando a los hombres, buscando diferencias en el uso de las manos, los movimientos y la forma de sentarse: “Fue maravilloso. Vestida como hombre, con mi sombrero bien ajustado. Los hombres del equipo de filmación estaban parados en un rincón, hablando entre ellos. Me paré junto y se dieron la vuelta para saludarme muy caballerosos. Me tomaron como un hombre. Y fue maravilloso que no se dieran cuenta de la diferencia”, dijo.
“A mí me encanta lo que hago y conservo siempre la misma pasión. Por eso también me pone triste si un proyecto no llega a tener éxito. Desde joven aprendí a mirar para adelante”.