Ciudad de México | 2023-05-02
La cocina, aunque es un lugar donde podemos dar rienda suelta a nuestra creatividad y experimentar, también es necesario tener en cuenta ciertas reglas para garantizar que sea un espacio seguro y que los platos resulten tal y como los imaginamos.
Sin duda alguna, existe una lista que todos debemos conocer con cosas que no debemos hacer en la cocina.
Échale un ojo a esta (muy reducida, pero importante) lista con 12 cosas que no debes hacer en la cocina. Todo con el objetivo de que procures tu salud y que, al final del día, tus recetas queden de maravilla.
Usar el mismo aceite más de dos veces puede ser peligroso. Según el estudio ‘Effects of deep frying on oil quality’ de Boskou, D., (1996) el aceite utilizado en la fritura se degrada con el uso y produce compuestos tóxicos que pueden tener efectos perjudiciales para la salud si se consume en grandes cantidades.
Además, el aceite usado pierde su calidad con el tiempo y puede alterar el sabor y la textura de los alimentos.
Esto puede favorecer el crecimiento de bacterias, especialmente si la temperatura de la habitación es cálida. Lo mejor es descongelar los alimentos en el refrigerador o en el microondas a baja potencia.
En las cocinas profesionales es muy común hacer una preparación previa de los ingredientes, como lavar, cortar, picar y porcionar, para tener todo listo antes de empezar a cocinar. Esto ayuda a acelerar el proceso y a prevenir errores.
Asegúrate de que la temperatura de tu sartén sea la adecuada antes de añadir los ingredientes. Esto permitirá una cocción uniforme y un resultado final óptimo, acorde a las instrucciones de la receta.
Es importante probar y ajustar el sazón mientras cocinas para lograr un resultado óptimo y entender cómo evoluciona el sabor a medida que avanzas en la preparación. Así, podrás asegurarte de que el plato tenga el sabor deseado al final o que, por ejemplo, no esté más picoso de lo que esperabas.
Asegúrate de leer cuidadosamente la receta antes de comenzar a cocinar para evitar omitir pasos importantes, tiempos de cocción o cualquier otra información relevante.
Cuando cocines carne, es importante que la cuezas de manera uniforme para obtener un sabor y una textura perfecta. Evita voltear la carne con frecuencia, ya que esto puede secarla.
En su lugar, cocina cada lado durante el tiempo necesario para obtener los resultados deseados. Ten paciencia y sigue el proceso adecuado para lograr la mejor carne posible.
Para evitar la contaminación cruzada, es esencial utilizar tablas de cortar específicas para cada tipo de ingrediente. De esta manera, podemos asegurarnos de que no hay riesgo de transferir sabores o bacterias no deseadas de un ingrediente a otro.
Cuando se trata de saltear verduras, es importante asegurarse de que estén completamente secas antes de agregarlas a la sartén. Si no, el exceso de humedad puede hacer que se cocinen al vapor y se vuelvan pastosas. Una centrifugadora es una buena opción para eliminar el exceso de agua antes de cocinar.
Aunque la higiene es importante en la cocina, lavar carnes crudas puede aumentar el riesgo de intoxicación alimentaria y propagar bacterias a las superficies de trabajo y utensilios de cocina cercanos.
Según la FDA, no es buena idea lavar el pollo crudo antes de cocinarlo porque los jugos que quedan en la superficie del pollo pueden propagar bacterias a otros alimentos y utensilios de cocina, y también pueden salpicar alrededor del fregadero y contaminar las superficies de la cocina.
Lavar el pollo crudo antes de cocinarlo no elimina las bacterias; en cambio, la cocción adecuada a una temperatura segura es suficiente para matar cualquier bacteria que pueda estar presente.
Cuando se cocina, es importante tener en cuenta el tiempo de cocción de cada ingrediente para evitar que algunos queden muy cocidos y otros crudos.
Por ejemplo, si cocinas un salteado de verduras, primero debes cocinar las verduras más duras y luego las blandas. Si no se sigue un orden, algunas verduras quedarán demasiado blandas y otras demasiado duras. Por lo tanto, siempre hay que seguir un orden lógico de cocción.
Después de cocinar la comida, es importante dejar que se enfríe antes de guardarla en el refrigerador. Si se guarda caliente, aumentará la temperatura de los alimentos cercanos y se interrumpirá la cadena de frío, lo que puede provocar el crecimiento de microorganismos.
Además, la condensación del calor puede provocar la formación de hielo en el refrigerador. Por lo tanto, es importante esperar a que los alimentos se enfríen antes de guardarlos en el refrigerador.