Veracruz | 2024-12-03
Danzar es uno de los movimientos corporales más sublimes del ser humano.
Expresar con el cuerpo, cualquier tipo de emoción, estado de ánimo nos signa como personas. Y cuando estos forman parte de una coreografía son todo un acontecimiento.
La danza a pesar de tener un carácter ancestral y ritual, fue tomando connotaciones de arte, al pasar de los siglos en las diversas culturas.
Ballet, danzas folklóricas, y populares han caracterizado el devenir social bajo distintos esquemas. La danza contemporánea es una de estas ramas, donde los sentimientos e impulsos son los parámetros de un coreógrafo o director artístico.
Algunas de estas premisas podemos atarlas a la vida de Alejandro Schwartz, destacado profesionista veracruzano en este renglón y respetado maestro en la Universidad Veracruzana.
Alejandro coordina y dirige con gran acierto la Compañía de Danza y Andantes Danza Contemporánea, donde le espléndido evento Contra Viento y Marea, soporta los avatares de todos aquellos bailarines en búsqueda de oportunidades y espacios para hacer lo propio, expresar sueños y anhelos con música alterna a su singular modo de danzar la vida.
Recientemente en el Reflexionario Mocambo vimos una muestra de cuadros detallados en canciones mexicanas de amor, así como también de protesta y crítica a la guerra.
Es hermoso como espectador tener este goce a los sentidos, pero también es una sacudida de conciencia pues sabemos estas manifestaciones carecen de la infraestructura adecuada para mantenerse en cartelera.
Esperamos en estos nuevos aires de administración pública estatal, contar con los apoyos necesarios para esta joven generación de bailarines, lo merecen y del mismo modo deseamos la presencia de Alejandro Schwartz en el imaginario de la danza pues su experiencia y personalidad son un bastión en las coordenadas del cuerpo, poesía y seducción de la obligada expresión corporal a todas las circunstancias de la existencia.