México | 2020-05-28 | Agencias
El uso de cubrebocas está causando en la población problemas de dermatitis y acné. En nuestra adaptación hacia una nueva normalidad nos hemos enfrentado a situaciones y tendencias que jamás imaginábamos. Las videoconferencias nunca habían sido tan indispensables en un mundo en el cual no podemos vernos a menos de 1.5 metros, darnos la mano e, inclusive, besarnos al saludar.
El uso de cubrebocas o tapabocas, forman hoy parte indispensable para poder hacer contacto con otra persona, evitar contagiar o ser contagiado, y aunque su uso en la población en general no ha sido del todo aceptado, es un hecho que se ha vuelto un accesorio indispensable y que ha llegado para quedarse por un buen tiempo.
Estas son las recomendaciones con las que aprenderás cómo puedes llevarlo y cuidar la piel de tu rostro para evitar cualquier lesión, como la dermatitis, provocada por diversos factores y entre las causas podremos encontrar irritación producida por el uso excesivo de cubrebocas que al roce constante con la piel provoca diversos estragos.
Contraproducente
En personas con antecedentes como rosácea, acné, piel sensible, dermatitis seborreica y otras afecciones de la piel, el uso de tapabocas también resulta incómodo y, por supuesto, contraproducente, agravando aún más estas condiciones o produciendo sudoración en la zona, lo que se traduce en otras anomalías en la piel.
De acuerdo con la dermatóloga Ana Valencia, este tipo de lesiones son muy comunes y debemos de contemplar un buen diagnóstico antes de tomar cualquier acción puesto que existen diversos tipos de dermatitis, pieles y tratamientos. No todo es a causa del cubrebocas.
“Lo más indispensable en estos momentos es mantenernos protegidos, pero si necesitas usar cubrebocas o máscaras por un largo periodo de tiempo, contempla cuidar tu piel mediante jabón neutro y cremas hidratantes hipoalergénicas o neutras (sin olor, sin perfume, sin color).
Si tienes alguna lesión cutánea superficial puedes aplicar cremas epitelizantes que favorecen la reparación epidérmica. Son indicadas para mejorar la cicatrización evitando la formación de cicatrices, además de prevenir la aparición de úlceras.
En caso de ocupar otros equipos de protección como cubrebocas N95 o goggles, que ejercen más presión, la Dermatóloga Ana Valencia recomienda colocar almohadillas para que el cubrebocas no esté en contacto directo con la piel y disminuya la presión. Son indicadas para mejorar la cicatrización, además de prevenir la aparición de úlceras.
En cuanto a los granitos, su reaparición se debe al roce de la mascarilla pero también a la oclusión que provoca en los poros: “La piel no puede respirar bien y el exceso de sudoración se queda en la zona peribucal, la más proclive a este tipo de brotes. Estamos viendo casos de acné un poco inflamatorio, como descamado”, explica esta doctora.
Post cubrebocas
Es esencial cuidar la piel antes, durante y después del uso del cubrebocas. Los siguientes pasos te pueden ayudarte a mantener la piel más sana.
Lavar el rostro con un limpiador suave utilizando un limpiador con un pH equilibrado que elimine los residuos de grasa, suciedad y bacterias. A la hora de elegir un limpiador, hay tres características clave: que no tenga fragancia, que no sea comedogénico y que no irrite la piel.
Algunas hidratantes intensivas pueden proporcionar un alivio rápido tras el uso de la mascarilla. Los clásicos Aquaphor de Eucerin (cuya pomada reparadora formulada sin agua, a base de parafina, con pantenol y bisabolol y glicerina acelera la regeneración cutánea en situaciones de extrema sequedad, piel dañada o irritada) o la Crema Hidratante de CeraVe (que mezcla ácido hialurónico con ceramidas para mantener la humedad hasta 24 horas) son un buen ejemplo.
Las zonas de mayor impacto, como la nariz y los pómulos, se pueden aliviar con apósitos hidrocoloides, muy eficaces para la cicatrización de heridas. Para las rojeces se recomienda utilizar un gel de árnica (recomendación habitual tras tratamientos médico estéticos por su eficacia ante la quemazón cutánea).
Y ante los brotes de acné, lo más indicado es seguir el tratamiento tópico habitual o, en los casos más severos, consultar a un especialista para un tratamiento en pastilla, tal y como recomienda Valencia.
Recuerda visitar o consultar de forma virtual a tu dermatóloga, con el fin de verificar si la rutina de skincare que estás llevando a cabo es adecuada bajo esta situación o quizá debas de modificarla, quitando algunos productos como ácidos o retinoides.